Yamamoto, de Dodgers, se queda a un out de lanzar sin hit ni carrera
El abridor japonés Yoshinobu Yamamoto recibe jonrón con dos outs en el noveno inning ante los Orioles, que luego vencen a Dodgers
Yoshinobu Yamamoto, estrella de los Dodgers, lanza durante el partido del sábado en Baltimore, donde brilló como nunca lo había hecho. Credit: Stephanie Scarbrough | AP
Jackson Holliday conectó un jonrón con dos outs en la novena entrada para impedir que Yoshinobu Yamamoto, pitcher estrella de los Dodgers, lanzara un juego sin hit ni carrera contra los Orioles en lo que pudo haber sido una noche histórica de sábado en Baltimore y que acabó siendo un colapso de los campeones reinantes del béisbol, derrotados 4-3.
El japonés Yamamoto, que todo el año ha sido el brazo más confiable de los Dodgers, acariciaba la gloria, pero su lanzamiento 112 del partido -una recta de 95 millas por la esquina de adentro- fue conectada por el zurdo Holliday y enviada apenas sobre la barda del jardín derecho para el primer hit de los Orioles, acercando a su equipo 3-1 en el marcador.
Yamamoto, que ponchó a 10 bateadores y caminó a 2, fue relevado de inmediato por el manager Dave Roberts. El as de 27 años sonrió cuando le pegaron el cuadrangular y tras ser felicitado por sus compañeros se retiró del campo bajo una ovación del público. La sonrisa desaparecería minutos después.
Bullpen de los Dodgers se derrumba en Baltimore
El relevista Blake Treinen, normalmente muy confiable, permitió que los Orioles llenaran las bases debido a su descontrol (1 hit, 3 BB) y luego caminó a Colton Cowser para forzar la segunda anotación del equipo de casa.
Tanner Scott, derrotado la noche previa cuando los Dodgers fueron dejados tendidos en el campo al perder 2-1, relevó a Treinen y recibió un hit de dos carreras del puertorriqueño Emmanuel Rivera al jardín central para el triunfo de Baltimore por 4-3, el cual alarga la racha perdedora de Los Ángeles a cinco partidos.
Los Dodgers (78-64) han jugado un béisbol decepcionante sobre todo desde el inicio de agosto, pero l actual gira ha sido u desastre al ser barridos en Pittsburgh por unos Piratas que ocupan el último lugar de su división y ahora han caído dos veces -dejados tendidos- ante otro equipo de abajo.
La noche de Ripken Jr. pudo ser la noche de Yamamoto
En una noche en la que los Orioles celebraban el 30 aniversario del increíble récord de 2,131 juegos seguidos de Cal Ripken Jr., Yamamoto estuvo a punto de hacer historia, pero en todo caso fue una jornada de completa fiesta para Baltimore.
Para los Dodgers, en cambio, se trata del golpe más doloroso que han sufrido en una temporada plagada de inconsistencia y con muy malas sensaciones en el mes final. Increíblemente, L.A. aún es líder de la División Oeste con 1.5 juegos sobre San Diego a espera del partido de los Padres.
Los Dodgers habían dado señales de vida el sábado al batear 10 hits tras varios juegos en los que su ofensiva estuvo moribunda. Un triple de Mookie Betts en la séptima puso el juego 3-0 mientras Yamamoto continuaba acumulando outs sin ningún contratiempo.
Pero el jonrón de Holliday en cuenta de dos bolas y un strike, cuando los Dodgers estaban a la espera de una joya de pitcheo que pudo haberles dado la chispa perdida, los ha dejado aturdidos y dolidos.
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