Así fue como Wanda Seux renovó el concepto de ‘vedette’ en México

La paraguaya Wanda Seux llegó a México para romper esquemas. Con un show al estilo de Las Vegas; con ostentosos vestuarios llenos de plumas y números parecidos a los de Liza Minnelli, la bailarina marcó por completo la década de los 70.

La llamada “Bomba de Oro” falleció este miércoles dejando tras de sí todo un legado. Nació en Paraguay a finales de los 40, durante su adolescencia se desenvolvió en las pasarelas juveniles. Su camino comenzó a los 18 años, cuando se mudó a Buenos Aires y comenzó su carrera como bailarina. El destino la llevó a Venezuela donde trabajó en un hotel, ahí fue descubierta por Hugo López, el mismo que se encargó de llevar la carrera de Luis Miguel.

En México pudo debutar en la pantalla grande con cintas como El arracadas y La hora del jaguar. También incursionó en la pantalla chica con telenovelas como Salón de Belleza. Ella siempre supo que tenía un estilo único que fue un parteaguas de las vedettes en México.

Se decía que su producción superaba los $9 mil dólares, cantidad que era espectacular para la época. Tanto sus trajes como su maquillaje estaban diseñados especialmente para que ella luciera radiante sobre el escenario. Derrochó bastante glamour, tanto que la llamaban “la Barbie de las vedettes”.

En sus espectáculos incluía lanzadores de cuchillos y peligrosos bailes con fuego. Wanda se paseó con estrellas de todo tipo como Vicente Fernández, Andrés García y María Victoria.

Se mantuvo vigente hasta principios de los 2000, participando en espectáculos teatrales y películas protagonizadas por otras reconocidas vedettes de su tiempo como Lyn May y Rossy Mendoza. Sin duda una estrella que nunca se apagará.

¿Deja la vedette Wanda Seux alguna fortuna?

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