Jurado halla capacitada mentalmente a madre hispana que arrojó bebé desde cuarto piso en California en 2011
La mujer se declaró inocente alegando que sufrió de delirios y alucinaciones el día del suceso. Ahora que la declararon mentalmente apta, puede recibir una pena de hasta 25 años de prisión
La madre mexicana que arrojó a su hijo de 7 meses desde el cuarto piso de un edificio de estacionamientos de un hospital en California estaba capacitada mentalmente en el momento del incidente ocurrido hace una década, determinó este lunes un jurado.
Sonia Hermosillo, de 41 años, enfrentó en las últimas semanas un juicio en el condado de Orange, California, para determinar si estaba mentalmente capacitada en el momento de la muerte del bebé el 22 de agosto del 2011.
El jurado decidió este lunes que estaba capacitada mentalmente, según reportó el periódico Orange County Register.
El juicio hace parte del proceso contra la inmigrante mexicana, que fue hallada culpable el pasado 4 de agosto de un delito grave de asesinato y un delito grave de asalto que causó la muerte de un niño. Sin embargo, aún estaba por definirse si estaba mentalmente capacitada al momento del incidente.
Hermosillo se había declarado no culpable. La defensa alegó que la mujer “sufría de delirios y alucinaciones en el momento de la muerte del niño que equivalían a una ruptura total con la realidad”, según reportó el rotativo.
El 22 de agosto de 2011, Hermosillo llevó a su hijo, Noé, al Hospital de Niños del Condado de Orange y estacionó su automóvil en el cuarto piso del edificio de estacionamiento del nosocomio.
El bebé tenía condiciones médicas que requerían que recibiera tratamiento en el hospital con regularidad, pero el infante no tenía una cita programada ese día.
El menor tenía un problema congénito que le obligaba a usar un casco médico para tratar de corregir el problema. Hermosillo le quitó el casco y lo lanzó desde el cuarto piso, argumentó la Oficina del Fiscal del Condado de Orange.
Un testigo que vio al bebé caer por el aire llamó al 911 y la policía acudió a la escena encontrando al niño aún con vida. En tanto, la mujer entró al hospital, validó su estacionamiento y se fue sin reportar el incidente.
El esposo de Hermosillo, Noé Medina, había llamado a la policía para informar que su esposa e hijo estaban desaparecidos. El hombre les dijo a las autoridades que su esposa había sido hospitalizada recientemente por depresión y que no se le permitía estar sola con el bebé.
El infante murió dos días después del incidente. La mujer fue arrestada mientras conducía por un vecindario cercano y desde ese entonces ha permanecido detenida sin derecho a fianza.
El juicio enfrentó numerosas demoras ya que Hermosillo recibió tratamiento de salud mental, mientras los expertos determinaban si estaba mentalmente capacitada para ser juzgada.
Aunque la fiscal Mena Guirguis, que llevó el caso, admitió que Hermosillo “tenía una depresión severa, muy severa”, argumentó que esto “no es una locura legal”, añadiendo que la mujer esperó que su esposo estuviera en la ducha para llevarse al niño y le quitó el casco al momento de arrojarlo.
Tras la decisión de hoy, Hermosillo será sentenciada el próximo 29 de octubre. La hispana puede enfrentar hasta 25 años de prisión.
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