Familiares exigen la renuncia de jefe de distrito escolar de Uvalde: “Mató a nuestros hijos”

Tras casi un mes de la masacre en la Escuela Primaria Robb en Uvalde, familiares de las víctimas y habitantes de la localidad han realizado llamados para que se despida al jefe de policía del distrito escolar durante una junta escolar este lunes.

Algunas personas instaron a los miembros de la junta escolar, incluidos las familias de los estudiantes y maestras que murieron durante el tiroteo.

“Pete Arredondo nos falló. Mató a nuestros hijos, maestros, padres y la ciudad, y al mantenerlo en su personal, continúan fallándonos”, expresó Brett Cross, identificándose como padre de un estudiante asesinado.

Cross añadió que aún tiene a sus hijos en el distrito escolar y que todos están temerosos. Él también.

“Tener a Pete todavía empleado, sabiendo que es incapaz de tomar decisiones que salven vidas, es aterrador”, declaró. “Hacer lo que es correcto. Retire a Pete del empleo”.

Varios días después de la masacre, el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steven McCraw, afirmó que Arredondo habría tomado la decisión equivocada cuando le dijo a los agentes bajo su mando que esperaran para entrar al aula donde se había atrincherado el pistolero.

“Me parece vergonzoso que tuviéramos casi 100 oficiales en la escena, y tuve que dejar el trabajo y salvar el mío”, dijo Angeli Gómez, otra madre.

Esta sería la segunda reunión luego del tiroteo que tuvo lugar el 24 de mayo, cuando Salvador Ramos, de 18 años de edad, asesinó a 19 alumnos y dos maestras.

En la última reunión, el superintendente dijo que nadie regresaría a Robb Elemntary, y el lugar de la tragedia, y que UCISD estaban en labores para trasladar a los alumnos que allí estudiaban.

Por su parte, Javier Cazares, padre de la estudiante asesinada Jacklyn Cazares, indicó los protocolos de seguridad que dijo que había recibido de UCISD anteriormente y apuntó lo que pensaba que eran fallas en ellos.

“Cada campus tiene un equipo para identificar y abordar amenazas potenciales”, leyó Cazares. “¿Quién era ese equipo y cuándo fue la última vez que vinieron?”

El padre de la víctima, Amerie Jo Garza, lloró mientras contaba que intentó de convencer a la policía de que lo dejaran entrar a la escuela.

“Hice que los oficiales del departamento me miraran a los ojos, porque estaba tratando de entrar y pedirme que confiara en ellos”, expresó. “¿Cómo se supone que debemos continuar con nuestras vidas aquí, sabiendo que esas personas que se supone que deben protegernos defraudaron a nuestra familia?”

También dijo que él y otros familiares quieren que se asuma la responsabilidad por el tiroteo en Uvalde.

“Hay tantas preguntas que obviamente todos tienen, ya sabes, si él estaba a cargo, ¿por qué no tenía una llave maestra? ¿Por qué no entraron?”, dijo el padre de Garza.

“La mayoría de estos padres no quieren estar aquí. Pero estamos aquí porque tenemos que hablar por nuestros hijos, porque ellos ya no pueden hablar por sí mismos. Así que, por favor, solo háganos un favor, y haga lo que sabe que es correcto, y haga que estas personas rindan cuentas por lo que sucedió”, dijo.

Los miembros de la junta escolar entraron en sesión cerca de las 8:15 de la noche del lunes. Los temas a conversar en la agenda incluyeron personal de seguridad, dispositivos de seguridad y una posible auditoría de seguridad.

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