La Fiebre del Valle se propaga rápidamente por todo el país, advierte exfuncionario de los CDC
La complejidad para diagnosticar y tratar a esta enfermedad es que comparte síntomas similares a los del COVID-19, pero requiere un tratamiento diferente
Los medicamentos destinados para vencer a las bacterias no tienen ningún efecto en el hongo que produce la coccidioidomicosis. Crédito: Spencer Platt | Getty Images
Una infección de los pulmones que provoca síntomas respiratorios como tos, dificultad para respirar, fiebre y cansancio o fatiga, se expande rápidamente por el territorio estadounidense, señala el Dr. Brad Perkins, exfuncionario de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)
De acuerdo con el experto, a la enfermedad se le conoce como Fiebre del Valle, pero también es llamada coccidioidomicosis o “cocos”.
“La mayoría de las causas de neumonía son causadas por bacterias. Este es un hongo que vive en el suelo y se respira en situaciones polvorientas, ya sea una tormenta de polvo o alrededor de una construcción o excavación”, menciona.
Perkins, quien actualmente funge como director médico de Karius, empresa que proporciona diagnósticos avanzados para enfermedades infecciosas, tiene claro que la complejidad para diagnosticar y tratar a La Fiebre del Valle es que comparte síntomas similares a los del COVID-19.
“Si una persona con coccidioidomicosis visita un médico, ya sea como paciente ambulatorio o que requiera de hospitalización, es probable que le receten medicamentos que son para las bacterias y que no tendrán ningún impacto en este hongo”, subraya.
En este sentido, el procedimiento más adecuado para identificar si un paciente es víctima de una bacteria u hongo de cualquier tipo, es mediante un análisis de sangre.
Cabe señalar que diversos especialistas sostienen que el cambio climático facilita la reproducción del hongo causante de la coccidioidomicosis en regiones secas.
De acuerdo con informes de los CDC, el sur de California, en particular el sur del Valle de San Joaquín, y el sur de Arizona, incluidas las áreas metropolitanas de Phoenix y Tucson, tienen las tasas más altas de Fiebre del Valle.
Asimismo, entre el 5% al 10% de las personas que contraen coccidioidomicosis desarrollarán problemas pulmonares graves o prolongados derivado de la fragilidad de su organismo para hacerle frente a la enfermedad.
“Las personas preocupadas por su riesgo de desarrollar la fiebre del valle deben tratar de evitar situaciones polvorientas, sobre todo en el verano y en el calor máximo”, concluye Brad Perkins.
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