NOAA predice una temporada de huracanes superior a la media en el Atlántico
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ahora predice de 14 a 21 tormentas en el Atlántico debido al récord de altas temperaturas en la superficie del mar
El huracán Don fue el primer huracán de la temporada de huracanes del Atlántico de 2023. Crédito: NOAA | Cortesía
El Centro de Predicción Climática de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) actualizó el jueves el pronóstico de la temporada de huracanes en el Atlántico de 2023 a un nivel de actividad superior a lo normal.
La actualización pronostica que ocurrirán de 14 a 21 tormentas con nombre, con vientos de 39 mph o más, de las cuales 6 a 11 podrían convertirse en huracanes, con vientos de al menos 74 mph. De esas, de dos a cinco podrían convertirse en grandes huracanes, con vientos de 111 mph o más.
En una temporada promedio, como se había pronosticado antes, habría 14 tormentas con nombre.
“Durante los años activos, se duplica la posibilidad de que un huracán golpee la costa este de Estados Unidos en comparación con una temporada promedio o inferior al promedio”, dijo Matthew Rosencrans, principal pronosticador de la temporada de huracanes del Centro de Predicción Climática de la NOAA.
Por qué se esperan más huracanes en el Atlántico
La razón principal por la que los científicos esperan más actividad es que el agua del océano en las áreas del Océano Atlántico donde se forman los huracanes está anormalmente caliente en este momento.
Se espera que permanezca así durante la temporada de huracanes, que comenzó oficialmente el 1 de junio y se extenderá hasta noviembre.
Eso es parte de una tendencia global de aumento de las temperaturas del océano debido al cambio climático, aunque los científicos todavía están tratando de entender qué está impulsando el calor oceánico récord de este año.
“La temperatura de la superficie del mar de junio/julio en la principal región de desarrollo del Atlántico Norte fue la más cálida desde 1950 con 1.23 grados centígrados por encima de lo normal”, dijo Rosencrans.
Este es un año de El Niño y, por lo general, ese patrón climático crea condiciones de viento que interrumpen los huracanes. Pero es probable que el agua más cálida contrarreste ese efecto, dijo Rosecrans.
Los funcionarios federales advierten a las personas que viven en áreas propensas a huracanes que no se concentren demasiado en la cantidad total de tormentas, porque una sola tormenta puede causar daños significativos.
Por eso, en las zonas en riesgo de huracanes, se aconseja hacer un plan sobre cómo evacuar si se avecina una tormenta, prepararse para cortes de energía y pensar en cómo cuidar a los miembros mayores de la familia, las personas con discapacidades, los niños y las mascotas.
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