La Patrulla Fronteriza liberó a cientos de inmigrantes en San Diego, en el sur de California
La Patrulla Fronteriza liberó a los inmigrantes en una parada de autobús después de que un centro de acogida provisional de San Diego se quedara sin dinero para ayudarlos
Cientos de inmigrantes que esperaban ser procesados para pedir asilo en Estados Unidos, fueron dejados el viernes por la Patrulla Fronteriza (CBP) en una parada de autobús en San Diego, en lugar de enviarlos a un centro de recepción que había estado sirviendo como área de espera, porque el lugar se quedó sin fondos locales para continuar operando antes de lo esperado, según The Associated Press.
El incidente muestra cómo incluso la ciudad más grande de la frontera sur de Estados Unidos está luchando para hacer frente a una afluencia de inmigrantes sin precedentes.
Los inmigrantes que antes tenían un lugar seguro para cargar teléfonos, ir al baño, comer y organizar su viaje a otros lugares de Estados Unidos ahora quedaron en la calle mientras los grupos de ayuda a migrantes se apresuraban a ayudar lo mejor que podían con arreglos improvisados.
Autobuses de la Patrulla Fronteriza que transportaban inmigrantes de Senegal, China, Ecuador, Ruanda y muchos otros países los dejaron frente a una parada de autobuses de San Diego.
Los grupos de ayuda a inmigrantes dijeron que desde allí los llevarían en autobús a un estacionamiento donde podrían cargar sus teléfonos y de ahí, llevarlos al aeropuerto.
La gran mayoría planeaba pasar sólo unas pocas horas en San Diego antes de tomar un vuelo o que alguien los recogiera.
San Diego es uno de muchos gobiernos locales que han luchado por ayudar a los inmigrantes sin sacrificar sus servicios clave, incluidos los de Nueva York, Chicago y Denver.
El condado de San Diego ha donado $6 millones de dólares desde octubre a SBCS, una organización sin fines de lucro anteriormente conocida como South Bay Community Services, para proporcionar estaciones de carga de teléfonos, comida, consejos de viaje y otros servicios en una antigua escuela primaria. El grupo pretendía mantener abierta la estaci’on de acogida hasta marzo, pero el jueves fue su último día.
Al igual que en otras ciudades fronterizas, los inmigrantes tienden a quedarse en San Diego menos de un día antes de partir a otros destinos, pero los grandes refugios operados por Jewish Family Service y Catholic Charities han estado llenos durante meses, dando prioridad a las familias.
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