Asesinan a golpes a un latino en la cárcel de Wasco en California

Seis reclusos fueron colocados en celdas restringidas en la Prisión Estatal de Wasco (WSP), cerca de Bakersfield, por presuntamente haber participado en la golpiza que acabó con la vida de David Domínguez.

Al mismo tiempo, funcionarios de prisión abrieron una investigación de homicidio tras la muerte del recluso, el sábado.

El personal de la prisión logró comunicarse con Domínguez, de 29 años, después de ver a otros reclusos ayudándolo alrededor una sala, declaró el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California (CDCR) en un comunicado de prensa.

Aproximadamente a las 2:30 p. m., autoridades penitenciarias observaron que Domínguez era apoyado físicamente por otras personas encarceladas.

El recluso le dijo al personal que había sufrido un ataque y se había caído.

“Se emitió inmediatamente una alerta médica de emergencia y el personal de salud que acudió determinó que [Domínguez] necesitaba un mayor nivel de atención”, indica el informe de las autoridades penitenciarias.

.El recluso fue trasladado al área de triaje donde se determinó la prioridad de tratamiento y se llamó a una ambulancia mientras se tomaban medidas para salvarle la vida. No obstante y a pesar de los esfuerzos, Domínguez fue declarado muerto por un paramédico a las 4:07 p.m.

Domínguez llegó desde San Diego a la prisión estatal de Wasco, ubicada en el condado Kern,  el otoño pasado.

Investigan la muerte como homicidio

Una revisión posterior del sistema de vigilancia de audio y video de la prisión mostró a los prisioneros José Landeros y Michael S. Padilla ingresando a la celda de Domínguez e iniciando un altercado físico.

Landeros y Padilla fueron colocados en celdas restringidas en espera de una investigación por parte de la Unidad de Servicios de Investigación de la Prisión Estatal de Wasco (WSP) y de la fiscal de distrito del condado Kern, Cynthia J. Zimmer.

Asimismo, fueron colocados en celdas restringidas, los encarcelados Robert Rubalcava, Leonel A. Torres, Zakary W. White y Mario Aguillón, como parte de la investigación.

Se notificó de la muerte de Domínguez a la Oficina del Inspector General y el forense del condado de Kern, misma que determinará la causa oficial de la muerte de la víctima.

Domínguez tenía 29 años de edad y había sido enviado a la prisión estatal de Wasco el 4 de octubre de 2023. Fue sentenciado en San Diego a tres años de prisión por extorsión mediante el uso de la fuerza, amenaza y agresión. Todos los delitos tenían agravantes por estar relacionado a las pandillas.

Los inculpados en el crimen

José Landeros, de 27 años, fue trasladado del condado de Riverside a la prisión de Wasco, el 6 de marzo de 2020.

El sujeto habeia sido sentenciado a los 16 años por robo en segundo grado con agravantes por el uso de un arma de fuego. También fue sentenciado por el condado de Kern, el 5 de enero de 2022,  a tres años y cuatro meses por robo en segundo grado, agresión con arma de fuego y encarcelamiento falso con violencia.

Michael S. Padilla, de 37 años, estaba preso por última vez, el 25 de mayo de 2023 en el condado de San Bernardino. Fue sentenciado a 22 años en prisión por homicidio vehicular grave en estado de ebriedad, un delito de segundo castigo, con mejoras por huir de la escena y por una condena previa por un delito grave.

Robert Rubalcava, de 40 años, fue recibido por última vez del condado de San Bernardino el 29 de septiembre de 2023. Él había sido sentenciado a 14 años por intento de asesinato en segundo grado, un delito catalogado en su caso como un segundo delito grave, con agravantes por el uso de arma de fuego y acto de pandilla callejera.

Leonel A. Torres, de 40 años, llegó a la prisión de Wasco, procedente del condado de Santa Bárbara, el 8 de noviembre de 2019.

Torres enfrenta una sentencia de cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional por asesinato en segundo grado.

Zakary W. White, de 27 años, está detrás de las rejas en Wasco, desde el 1 de febrero de 2024. Fue declarado convicto en el condado de Riverside por cometer un segundo delito grave de robo de vehículos. Enfrenta una sentencia de seis años.

Mario Aguillón es el sexto presunto implicado en la muerte de David Domínguez, tiene 37 años de edad y fue recibido del condado de Los Ángeles en Wasco, el 2 de febrero de 2005. Está sentenciado a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional por asesinato en primer grado.

Posteriormente, el 15 de noviembre de 2013, Aguillón fue condenado en el condado de Sacramento, con posibilidad de libertad condicional,  por un delito de agresión cometido en prisión.

La Prisión Estatal de Wasco (WSP), que se encuentra ubicada en el condado de Kern, abrió sus puertas en 1991 y alberga aproximadamente a 3,300 reos y emplea a aproximadamente 1,470 personas.

Una calentada

Luis Vargas, de 55 años, quien estuvo preso injustamente por 18 años en diversas cárceles y prisiones de California por delitos, dijo, que nunca cometió, analizó que, a David Domínguez “los pandilleros de la prisión quisieron darle una ‘chequeada’ [examinarlo] y una calentada [golpiza”.

“Si él no quiso revelar quién lo golpeó fue porque si lo hacía se metería en más problemas. Esa muerte no debería haber pasado más de una chequeada, pero creo que lo golpearon tanto que le causaron muchas heridas internas”, especuló.

Vargas, quien ahora es un predicador cristiano, describió que los dos reos que entraron a la celda de Domínguez, “seguramente lo hicieron cuando los están dejando salir a la yarda, al recreo y las celdas se mantienen abiertas; en esos momentos los oficiales no están revisando quién sale y quién entra”.

Vargas fue liberado el mes de mayod e 2016, luego de casi dos décadas a la sombra por un delito que no cometió, expresó. 

Testigo de 27 asesinatos

“Me tocó ver cuando mataron a aproximadamente a 27 presos” reveló Vargas. “Ese amigo [David Domínguez] quizás debía dinero por la droga y no podía pagar, o tal vez cometió algún crimen. como cualquier tipo de violación que la ‘junta’ de los Sureños [pandilleros] no aceptan,”.

De acuerdo con Public Inteligence. La Mafia Mexicana (La Eme) controla las actividades criminales dentro y fuera de las prisiones de California, y la pandilla Varrio Wasco Rifas fue la única organización criminal reconocida en la Prisión Estatal de Wasco; ellos dominan mayormente la parte oeste de esa ciudad de 27,731 habitantes.

Vargas comentó, además, que, en todas las prisiones de California, particularmente las pandillas de reos latinos que integran “La Mesa” (líderes) está integrada por los “tenientes”, “capitanes”, “generales” y “sargentos”, quienes tienen los rangos mayores de poder.

“Al final están los muchachos que golpearon al preso [José Landeros y Michael S. Padilla]. A esos se les llama “soldados” o “peones”; son quienes hacen la limpieza de la yarda, y cuando los que mandan quieren mandar a golpear a alguien o quieren deshacerse de él, les dicen “hay que limpiar la casa”… Ellos son quienes hacen el trabajo sucio de la pandilla”, afirmó Vargas.

En marzo de 2024, CalMatters informó que, desde 2005, más de 2,700 reclusos han muerto en cárceles de California.