Obispo mexicano revela que a los líderes del narco se les pide permiso para todo
El obispo de Cuernavaca, Morelos, Ramón Castro, hizo un llamado a las autoridades denunciando que hay funcionarios que pactan con el crimen organizado
El obispo es reconocido por su activismo contra la violencia. Crédito: Diocesis de Cuernavaca | Cortesía
En una marcha por la paz en Cuernavaca, Morelos, organizada por la Iglesia católica este fin de semana, el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro, hizo un llamado a la conciencia pública y a las autoridades estatales denunciando que hay funcionarios que pactan con el crimen organizado como condición para integrarse al gobierno.
El religioso, reconocido por su activismo contra la violencia, afirmó que “aunque nadie lo diga abiertamente, es un secreto a voces a los líderes del narco hay que pedirles permiso”.
Al hablar sobre la corrupción, fue contundente: “Muchas empresas proveedoras del gobierno pertenecen al narco… y lo peor es que todos lo saben y hasta miden su porcentaje”. Lamentó que las propias autoridades estén involucradas en estos negocios.
Su mensaje fue recibido por cientos de asistentes que marcharon vestidos de blanco en un evento simbólico que comenzó con una misa en la Iglesia de Tlaltenango y concluyó en la Catedral de Cuernavaca.
Las participantes portaban pancartas con mensajes de paz y justicia, según informó el diario Milenio.
Solidaridad con madres buscadoras
En el recorrido, Castro entregó flores blancas a madres buscadoras, en muestra de apoyo y solidaridad. “No están solas en su lucha”, afirmó, reiterando su compromiso con las víctimas de la violencia.
Ya en el atrio de la Catedral, el obispo exigió a las autoridades “terminar con la impunidad y la ineficiencia en la seguridad pública”. Aseguró que México vive una grave crisis por la falta de estrategias eficaces contra la violencia, lo cual está deteriorando el tejido social.
Esta no es la primera vez que el obispo Castro lanza críticas severas al sistema de seguridad en el estado. En ocasiones anteriores ha alertado sobre la alta incidencia de extorsión telefónica que afecta directamente a la Iglesia católica en Morelos.
Denunció que los párrocos y personal eclesiástico han sido blanco de intentos de fraude y amenazas, muchas veces con engaños que involucran su nombre. “Incluso algunos han caído”, dijo.
“La paz es la tranquilidad del orden, cuando todo está en su lugar (…) Hoy no podemos estar tranquilos, porque muchas cosas están fuera de lugar. Por eso no hay paz”, señaló.
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