¿Qué es la magia negra y por qué es tan peligrosa?
Dentro de los hechizos o conjuros de magia negra se invocan espíritus malignos
La magia negra se usa para provocar el mal. Crédito: Pixabay
Los encantos y hechizos son propios de la magia, concepto que la Real Academia Española define como el arte o ciencia oculta que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de seres imaginables, resultados contrarios a las leyes naturales. Existen dos tipos: la magia blanca y negra. En esta ocasión, nos enfocaremos a explicar en qué consiste la segunda.
Se trata de un rito al que se invocan seres oscuros (como el diablo) para obtener beneficios a consta de otra persona o, en el peor de los casos, afectarla de manera directa.
La magia negra va más allá de perjudicar a un solo individuo, su objetivo puede llegar a dañar a una sociedad en general. En estos ritos, se podrían utilizar animales vivos o muertos, así como sangre propia o de terceros.
Se emplea para hacer un mal a una persona en específico, vengarse de un enemigo, arruinar la competencia o impedir la prosperidad.
Asimismo, puede ser usada para conseguir cosas que se anhelan y que no puedes hacerte de ellas por el camino del bien como, por ejemplo, obligar que alguien se enamore de ti, hacerte de dinero mal habido, etc.
Espiritualmente se cree que la magia negra tuvo su origen tras la caída de unos ángeles del cielo que se enamoraron de unas mujeres con quienes engendraron hijos y les enseñaron todos sus secretos, generando caos en el mundo, lo cual desapareció tras el diluvio, según cuenta el libro de Enoch.
Un origen más histórico apunta a los primeros seres humanos quienes, al no tener explicación de fenómenos naturales como truenos o eclipses, atribuían estos acontecimientos a seres superiores, dedicándoles hechizos y conjuros. Cuando se dieron cuenta del poder que tenían estas prácticas, algunos comenzaron a usarlas para provocar el mal en sus enemigos.
Cualquiera que sea su origen y pasado, en el mundo siempre debe haber un equilibrio y para eso está la magia blanca, cuyo objetivo principal es contrarrestar los efectos de la magia oscura.
Una persona que practica la magia negra puede volverse perversa y atravesar los límites de la moralidad y ética, incluso sus ambiciones pueden llegar a provocar o desear la muerte de un semejante. Es por eso que se tiene la creencia de que practicar esta oscura disciplina, tiene un alto costo.
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