Sin acuerdo en reunión sobre plan de infraestructura entre Biden y líderes del Congreso
El plan de empleo centrado en infraestructura propuesto por el presidente encabezó el encuentro con representantes demócratas y republicanos de ambas cámaras en la Casa Blanca
Biden se reunió con los líderes de ambas Cámaras del Congreso. Crédito: Doug Mills-Pool | Getty Images
El presidente Joe Biden recibió a los líderes demócratas y republicanos de ambas cámaras del Congreso el miércoles en la Casa Blanca, donde discutieron el plan de empleo centrado en infraestructura del presidente durante casi dos horas, pero avanzaron poco en llegar a un consenso.
Esta fue la primera vez en su presidencia que Biden se reunió en persona con los llamados Big 4: el líder demócrata de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, de Nueva York, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de California, y el líder republicano de la minoría del Senado, Mitch McConnell, de Kentucky y la Cámara. Líder de la minoría Kevin McCarthy de California. La vicepresidenta Kamala Harris también asistió a la reunión, que tuvo lugar en la Oficina Oval.
“Hoy vamos a hablar mucho sobre infraestructura. Y veamos si hay alguna manera de llegar a un compromiso que haga el trabajo de la gente y esté dentro de los límites de que todos estén de acuerdo “, dijo Biden al principio del encuentro entre representantes de ambas cámaras.
This morning, Vice President Harris and I met with a bipartisan group of Congressional Leaders. As I’ve said before, we can’t let the divisions of the present stop us from doing right by the future. We’re committed to working together to build back better for the American people. pic.twitter.com/EaR5vwPoaj
— President Biden (@POTUS) May 12, 2021
Después de la reunión, McCarthy y McConnell hablaron brevemente con los periodistas.
McConnell dijo que casi toda la conversación con el presidente giró en torno a su plan de empleo centrado en infraestructura y que existe “un deseo bipartidista de obtener un resultado”.
Pero agregó que las dos partes aún necesitaban “definir qué es la infraestructura”, sugiriendo que no habían logrado avances significativos en los elementos más básicos de una negociación.
Una lectura de la reunión de la Casa Blanca dijo que los asistentes habían “acordado que había una necesidad de inversión” en infraestructura, pero no citaron ningún otro progreso.
Pelosi sonó la más optimista de los asistentes, y dijo después de la reunión que se sentía “más optimista ahora que haremos [infraestructura] de manera bipartidista. Pero ya veremos”.
La primera pieza de la agenda de política nacional de Biden en dos partes es el Plan de Empleo Estadounidense de $2.3 billones de dólares, que tiene como objetivo una amplia gama de gastos en infraestructura que abarca tanto proyectos tradicionales como carreteras, como esfuerzos más progresistas, como la ampliación de la banda ancha.
Los republicanos se han opuesto al plan de Biden de clasificar proyectos como estaciones de carga de vehículos eléctricos y banda ancha ampliada como “infraestructura”.
McConnell también reiteró la firme línea roja del Partido Republicano sobre el aumento de la tasa impositiva corporativa, que se redujo drásticamente en 2017 bajo el entonces presidente Donald Trump, para financiar cualquiera de las propuestas de Biden.
“No estamos interesados en reabrir la ley de impuestos de 2017. Ambos lo dejamos claro con el presidente. Esa es nuestra línea roja”, dijo McConnell. “Esta discusión… no incluirá la revisión de la ley de impuestos de 2017”.
La segunda parte de la agenda de Biden es el Plan de Familias Estadounidenses de $1.8 billones de dólares, que propone fondos para cuatro años adicionales de educación universal gratuita, el subsidio del cuidado infantil para familias de clase media y expandir la licencia familiar pagada y los créditos tributarios por hijos.
Durante su campaña presidencial, Biden prometió cruzar el pasillo y encontrar áreas de consenso entre las dos partes, algo que dijo que ayudaría a reparar la nación profundamente dividida.
Sin embargo, los republicanos dicen que la única forma en que Biden podría esperar ganar el apoyo bipartidista para cualquier parte de su agenda legislativa es reduciendo su plan de infraestructura a menos de la mitad de su tamaño actual, y no financiándolo con aumentos de impuestos a las corporaciones, como propone Biden. pero con tarifas de usuario para los conductores y los usuarios de transporte público.
En cuanto al plan de cuidado de la familia y del niño, hasta ahora han surgido pocas áreas de compromiso, si es que hay alguna.
Biden también se encontró buscando puntos en común con un Partido Republicano fracturado, complicando aún más el cálculo político.
La reunión del miércoles tuvo lugar pocas horas después de que los republicanos de la Cámara de Representantes expulsaran a la representante Liz Cheney, de su puesto como presidenta de la conferencia republicana por su negativa a aceptar la mentira de Trump de que las elecciones de 2020 fueron manipuladas.
