California pone fin este martes a casi todas las restricciones por COVID-19
Los residentes vacunados del estado dorado pueden volver a una vida parecida a la que llevaban antes de la pandemia: sin mascarillas, sin distanciamiento social y sin límites de aforo
La economía californiana reabre completamente después de 15 meses. Crédito: FREDERIC J. BROWN | AFP / Getty Images
California, el primer estado del país en lanzar una orden de confinamiento al inicio de la pandemia, acaba este martes con la mayoría de medidas que había impuesto para frenar la propagación del virus.
A media noche de este 15 de junio llegó lo que el estado ha anunciado como la “gran reapertura” lo que implica que ya no están en vigor las medidas de distanciamiento social ni los límites de aforo en restaurantes, bares, gimnasios, estados o centros comerciales. Además, las personas vacunadas no tendrán que llevar mascarilla en la mayoría de lugares (interiores o exteriores), aunque tanto los negocios como los condados todavía pueden mantener la obligatoriedad de cubrirse boca y nariz.
La economía californiana reabre completamente por primera vez tras 15 meses y lo hace a las puertas del verano y en un momento en el que tanto los nuevos casos de coronavirus como las hospitalizaciones y los fallecimientos han caído. Las autoridades estatales siguen animando a vacunarse con incentivos monetarios, tarjetas regalo y paquetes vacacionales. Este mismo martes tendrá lugar el último sorteo anunciado, en el que 10 personas ganarán $1.5 millones de dólares cada una.
Los residentes del estado dorado pueden volver a una vida parecida a la que llevaban antes de la pandemia. Los aficionados a cualquier deporte pueden ir a ver a sus equipos jugar sin tener que llevar mascarilla ni mantener la distancia, parques de atracciones como Disneyland abrirán sus puertas a turistas después de meses recibiendo solo a residentes y los bares no tendrán que controlar la distancia de seguridad en sus interiores.
La doctora Barbara Ferrer, directora de salud pública del condado de Los Ángeles, dijo que los cambios en todo tipo de espacios públicos serán drámaticos desde este martes 15 de junio. “No habrá límites de capacidad ni requisitos de distancia […] en “restaurantes, bares, discotecas, salones de juego, centros de entretenimiento familiar”, explicó.
El condado de Los Ángeles lanzará una guía de “buenas prácticas” para las próximas semanas, pero no serán de obligado cumplimiento.
Los trabajadores sí que tendrán que esperar un poco más para quitarse la mascarilla en sus puestos de trabajo. La Junta de Normas de Salud y Seguridad Ocupacional de California sugirió que aprobaría una regla que les permita hacerlo a partir del 28 de junio. Cuando esta norma entre en vigor, tampoco será necesario mantener la distancia de seguridad en la mayoría de lugares de trabajo.
En escuelas, guarderías, campamentos, instalaciones de atención médica, instalaciones de convivencia de alto riesgo como residencias de mayores, transporte público y megaeventos sí siguen en vigor restricciones especiales.
Los organizadores de eventos en el interior con más de 5,000 personas, como los deportivos, tendrán que comprobar que todos los asistentes están completamente vacunados o tienen un test negativo de las 72 horas previas al inicio del evento.
Algo parecido se recomienda para eventos al aire libre con más de 10,000 asistentes. Pero, en estos casos, los organizadores tienen la opción de dejar entrar a personas no vacunadas o sin prueba negativa siempre y cuando usen mascarilla todo el tiempo.
California tiene una de las tasas de infección más bajas del país. El porcentaje de pruebas con resultados positivos positivos está por debajo del 1%, según los datos oficiales del estado. Además, el número de vacunaciones sigue creciendo, aunque ahora más despacio. El gobernador Gavin Newsom tuiteó el pasado domingo que un 72% de la población adulta había recibido al menos una dosis de la vacuna, lo que acerca al estado dorado a la llamada inmunidad de grupo.
