AMLO propone a Estados Unidos reorganizar el flujo migratorio atado a la integración económica

La Cumbre de Líderes de América del Norte fue aprovechada por el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador para proponer al presidente Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris la reoganización del flujo migratorio con base en la integración económica; el encuentro con Trudeau estuvo lleno de halagos y promesas por los indígenas

Los mandatarios de América del Norte, Andrés Manuel López Obrador, Joe Biden y Justin Trudeau.

Los mandatarios de América del Norte, Andrés Manuel López Obrador, Joe Biden y Justin Trudeau. Crédito: MANDEL NGAN | AFP / Getty Images

WASHINGTON.- El presidente Andrés Manuel López Obrador destacó la importancia de la relación económica entre México y Estados Unidos, así como su impacto en Latinoamérica, por lo que sugirió a la vicepresidenta Kamala Harris reorganizar el flujo migratorio con base en esa integración de mercado.

“La integración económica refuerza Norteamérica… necesitaríamos reorganizar el flujo migratorio… con oportunidades de crear crecimiento”, dijo el mandatario mexicano. “Nosotros producimos lo que Norteamérica necesita… y es ideal no sólo para Norteamérica, sino para todo el continente”.

El presidente López Obrador lanzó la idea que ha planteado en otros momentos, de generar un mercado similar a la Unión Europea.

“Así como la Unión Europea se concretó… ese debería ser nuestro ideal”, expresó.

La Cumbre de Líderes de América del Norte (NALS) fue un día intenso para todos los mandatarios, pues el mexicano se reunión con el primer ministro Justin Trudeau, luego con la vicepresidenta Harris y al final con el presidente Joe Biden.

Aunque hubo algunos guiños a la prensa sobre los planes, la llamada letra chiquita, el detalle de los acuerdos por venir se vieron a puerta cerrada. En cada reunión se permitió tiempo para el enorme equipo de prensa de los tres países, tomar fotos, lanzar halagos y peticiones con pocas esperanzas de concretarse.

Tal fue el caso del presidente mexicano, quien luego de intercambiar halagos con la vicepresidenta agradeció Administración Biden que enviara una reforma migratoria para ser aprobada en el Congreso, desconociendo que a unos pasos de donde se reunía con Harris los representantes discutían un plan migratorio lejos de esa propuesta.

Con el presidente Biden, la reunión del mandatario mexicano estuvo marcada por las anécdotas, la importancia del presidente Franklin D. Roosevelt, quien inició la política del buen vecino con México. El estadounidense celebró la relación de casi 200 años entre ambos países, pero dijo que ya no se trata de vecinos.

“Somos iguales”, expresó.

La reunión con la vicepresidenta Harris toma relevancia, pues es la responsable de la Administración Biden de implementar un plan económico que ayude a detener la migración irregular desde Centroamérica.

Los 200 años y la integración

El mandatario demócrata destacó que, desde enero, es decir, cuando inició su Gobierno, su equipo ha sostenido relaciones con México que derivaron en los diálogos de Alto Nivel Económico y de Seguridad, siendo este último el inicio del fin de la Iniciativa Mérida y el camino hacia un nuevo entendimiento para enfrentar al crimen organizado.

El presidente Biden destacó que el siguiente año se celebrarán los 200 años de la relación de ambas naciones, lo cual será celebrado con nuevos acuerdos y festejar los lazos familiares y de tradición que unen a ambas naciones.

“Presidente, le quiero agradecer su compromiso por la relación México-Estados Unidos, que se hace cada vez más cercana… y espero que podamos hablar de diferentes temas”, dijo.

El mandatario mexicano se mostró “satisfecho” y “agradecido”, pero luego volvió a mencionar su idea de integración económica continental.

“Vamos a ayudar… a participar para la integración económica de América del Norte y de todo el continente, fortalecer nuestra región, ante el avance de otras regiones en el mundo”, señaló. “Integración económica con respeto a nuestra soberanía. Tenemos muchas posibilidades”.

La reunión entre López Obrador y Biden fue cordial. / FOTO: Getty Images

¿Y Permanecer en México?

El presidente López Obrador volvió a agradecer a Biden haber presentado una reforma migratoria, la cual se encuentra estancada y con pocas posibilidades en el Congreso, en medio de la discusión del paquete económico Build Back Better (BBB – Reconstruir Mejor).

Dijo que había hecho el compromiso en Nueva York con los inmigrantes, a quienes señaló que comentaría sobre la reforma migratoria, aunque ese hecho en sí no cambia la discusión en el Congreso.

El tema espinoso entre ambos mandatarios fue el programa Protocolos de Protección al Migrante (MPP), conocido como Permanecer en México del cual se adelantó que no sería abordado.

La portavoz Jen Psaki fue cuestionada en la conferencia de prensa, pero dijo que se había acordado que no sería parte de la agenda esa política iniciada por el expresidente Donald Trump que obliga a peticionarios de asilo a esperar en México una cita en cortes estadounidenses.

Un alto funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó a este periodista que ese programa no es de interés de México, sino de EE.UU., debido a la orden de un tribunal en Texas, tras una demanda de gobiernos republicanos de Texas y Misouri, por lo que esperarán a ver hacia dónde quiere moverse la Administración Biden en ese asunto.

Sin embargo, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha dicho en varias ocasiones que México analiza los “detalles técnicos” del programa.

El primer ministro Justin Trudeau y el presidente mexicano López Obrador. / FOTO: Cortesía Gobierno de México

Con Trudeau por los indígenas

López Obrador tuvo un diálogo con el líder canadiense en Instituto Cultural Mexicano, a donde escuchó desde la ventana a una treintena de seguidores con mariachi, un número mucho menor que los que se congregaron en Nueva York para su visita a las Naciones Unidas.

Los mandatarios destacaron que el Tratado México-Estados Unidos-Canadá se aplicaría para favorecer a comunidades indígenas, aunque no dijeron cómo lo harán.

Ambos mandatarios se declararon “muy felices” por el encuentro, el primero frente a frente.

“Somos pueblos, naciones, hermanas muy unidas, pertenecemos a Norteamérica y tenemos muchas cosas en común”, dijo López Obrador. “Y lo más importante, (tenemos) una muy buena relación de cooperación y amistad”.

No todo es felicidad

La portavoz Psaki fue cuestionada porque hubo varios temas que parecían que los líderes querían “obviar”, como la crítica de Canadá por las vacunas contra COVID-19, el interés de México de tener más de esas vacunas.

En las últimas semanas, el gobierno canadiense ha dicho que el crédito fiscal ofrecido a los consumidores estadounidenses que compran vehículos eléctricos fabricados en Estados Unidos infringe el T-MEC.

“No lo vemos de esa manera”, dijo Psaki. “En nuestra opinión, el crédito fiscal para vehículos eléctricos es una oportunidad para ayudar a los consumidores en este país”.

También faltó hablar de los problemas de seguridad, de las violaciones a los derechos humanos de inmigrantes, del bloqueo que México tiene a la DEA… y un largo etcétera.

Esta vez menos seguidores de López Obrador acudieron frente a la Casa Blanca, pero expresaron su entusiasmo por el mandatario. / FOTO: JESÚS GARCÍA

Menos simpatizantes

Poco más de 50 personas se reunieron en el Parque Lafayette para celebrar la visita del presidente López Obrador y agradecer su impulso a la reforma migratoria. El mariachi Nuevo Amanecer volvió a participar desde la noche que llegó el mandatario y en la mañana se movió del parte al edificio del Instituto Cultural Mexicano.

“Estamos apoyando al compañero presidente López Obrador… esto es prácticamente una continuación del AMLOFest que se celebró hace dos semanas en Nueva York”, defendió Ulises García, del Comité Morena New York Uno, aunque había mucha menos gente, no había pantalla gigante ni grupos musicales varios. Eso sí los obradoristas disfrutaron tamales y tortas de jamón con frijoles durante el desayuno y la comida.

Cerca de ello, replegados por el Servicio Secreto debido al paso de los convoys presidenciales, los simpatizantes de AMLO no quisieron ser confundido con los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS) que “crucificaron” a migrantes para exigir una reforma migratoria justa. Resultó curioso que los mexicanos no vieran que aquellos tepesianos pedían lo mismo.

Tienen allá compañeros que piden lo mismo, se le cuestionó a uno de los obradoristas. “Estamos separados”, se apuró a responder.

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