LAPD anunció 14 arrestos relacionados con la oleada de robos recientes, pero todos salieron libres

Después de una serie de robos descarados que dejaron nerviosos a los minoristas y compradores del área de Los Ángeles el mes pasado, las autoridades anunciaron el jueves que habían arrestado a 14 sospechosos en relación con los crímenes.

El alcalde Eric Garcetti y el jefe de policía de Los Ángeles, Michel Moore, junto con otros funcionarios y miembros de la comunidad empresarial en la sede de LAPD, dijeron que ninguno de los 14 sospechosos permanece bajo custodia.

Uno de los sospechosos es un menor, dijo Moore. Los otros pagaron fianza o fueron puestos en libertad sin fianza.

Moore señaló que esto obedece a la política de cero fianza implementada el año pasado para ciertos delitos, incluido el robo, como una medida de salud pública para reducir la población carcelaria durante la pandemia de COVID-19.

“Hay elementos criminales que están reconociendo esa condición y la están capitalizando”, dijo Moore.

Señaló uno de los incidentes como ejemplo: el robo del 23 de noviembre en una tienda departamental de Nordstrom en el centro comercial Grove en el distrito de Fairfax.

Tres sospechosos fueron arrestados después del robo y una persecución que llegó al sur de Los Ángeles, dijo la policía.

Uno era menor de edad y los otros dos sospechosos adultos tienen antecedentes penales y fueron puestos en libertad sin fianza.

Garcetti dijo que la comunidad necesita la ayuda del sistema de justicia penal, jueces y carceleros.

“Hay gente que necesita estar tras las rejas”, dijo. “Hemos abierto gran parte de la ciudad, porque estamos en un lugar mejor con COVID. También deberíamos poder abrir nuestras cárceles, y deberíamos poder tener jueces que también pongan a las personas tras esas rejas”.

El alcalde aseguró que los centros comerciales son lugares seguros para comprar durante la temporada navideña, y dijo que la policía cuenta con el apoyo total suyo y del ayuntamiento y se les están proporcionando los recursos que necesitan para poner fin a los robos.

Después del robo de Nordstrom, Moore le dijo a la Comisión de Policía de Supervisión Civil de la ciudad que estaba intensificando las patrullas alrededor de los minoristas de alta gama.

Días después, la policía entró en alerta táctica en toda la ciudad la noche del Black Friday en respuesta a la serie de robos, levantando la alerta a las 2 a.m. del sábado.

Durante la conferencia de prensa del jueves, Garcetti instó a los miembros del público a estar atentos a su entorno y pasar menos tiempo en sus teléfonos.

Garcetti dijo que él y otros funcionarios quieren lograr un equilibrio entre llamar a la vigilancia pública y no causar pánico.

“No es algo que hayamos visto con demasiada frecuencia”, dijo Garcetti sobre los robos. “Es un crimen tan audaz y descarado. Es como llegar al corazón de lo que creemos que debería ser una ciudad”.

Moore dijo que a principios de noviembre comenzaron a llegar informes de robos a mano armada desde ciudades como Nueva York, Chicago y San Francisco.

“Estos crímenes se caracterizaron por múltiples sospechosos trabajando juntos y coordinando instancias que involucraron destrucción de propiedad, asalto a empleados de tiendas y caravanas de vehículos estacionándose muy cerca de tiendas minoristas de alta gama”, dijo el jefe.

Moore dijo que se acercó a sus homólogos en esas ciudades para tratar de tener una idea de la dinámica, dónde y cómo estaban ocurriendo los crímenes, y cómo estaban respondiendo esos departamentos de policía.

“Desafortunadamente, eso aterrizó en nuestra puerta a partir del 18 de noviembre, cuando ocurrió el primer incidente de un robo en la tienda de ropa Ksubi ubicada en la División Wilshire en el sur de La Brea”, dijo el jefe. “Su pérdida de propiedad fue de $10,000 dólares”.

Desde el 18 hasta el 28 de noviembre, el Departamento de Policía de Los Ángeles respondió a 11 robos a mano armada, dijo Moore.

De los 11 incidentes, seis ocurrieron en el lado oeste; cuatro ocurrieron en el Valle de San Fernando y uno en el sur de Los Ángeles.

Los incidentes se clasificaron como cuatro robos, seis robos y un hurto mayor, dijo Moore.

Lo que es “sorprendente en ese pequeño número de delitos fue la cantidad de propiedad que fue robada: $338,000 dólares en el transcurso de esos 11 casos, y más de $40,000 dólares en daños a la propiedad”, dijo.

Moore dijo que la policía cree que la mercancía se está revendiendo y vendiendo a compradores sin escrúpulos. “La cadena de responsabilidad se extiende hasta el final… hasta el comprador dispuesto a pagar una tarifa con descuento para conseguir un trato”, dijo, y agregó que los agentes están averiguando dónde están vendiendo las personas este material a través de entrevistas y órdenes de registro en los teléfonos.

Leer más
* Autoridades detuvieron a cuatro sospechosos de participar en robo a Home Depot en Los Ángeles
* Robos a mano armada aumentan un 73% en el condado de Los Ángeles
* Departamento de Policía de Los Ángeles creará fuerza especial para investigar robos a domicilio