Cómo limpiar la funda protectora del teléfono dependiendo de su material

El uso de las fundas protectoras para teléfonos celulares es algo que se ha venido popularizando en todo el mundo. Estos accesorios además de proteger el equipo ante potenciales caídas también sirven como un mecanismo para personalizar los teléfonos y darles un toque distintivo.

Sin embargo, con el paso del tiempo estos accesorios suelen ir acumulando suciedad ya que al estar en contacto directo con las manos de los usuarios, sustancias como grasa o sucio se suelen ir depositando sobre su superficie. Esto genera que en tan solo unos meses estos pueden perder sus tonos originales y pasar a verse amarillentos, algo que puede llegar a resultar sumamente desagradable a simple vista.

Ante esta situación la mejor opción es lavarlos, no obstante, este proceso dependerá directamente del tipo de material del que esté elaborada la funda. Acá te contamos todo lo que tienes que tomar en cuenta para poder limpiar la funda protectora de tu teléfono de la forma más fácil posible:

1. Silicona

Las fundas y protectores de silicona son unas de las más comunes en el mercado por lo que es altamente probable que la tuya pueda ser de este material. De ser así, tienes que saber que los mejores mecanismos para limpiar tu funda pueden ser un paño de microfibra, un cepillo de dientes y jabón de lavar los platos.

La razón de ello es que la silicona es un material sumamente sensible a los productos demasiado abrasivos por lo que lo mejor es optar por productos que pueden retirar la suciedad sin llegar a destruirla.

2. Plástico

Si bien estas carcasas son utilizadas en menor medida, ofrecen la posibilidad de utilizar una mayor cantidad de productos de limpieza. En este caso sí es posible utilizar químicos como la lejía ya que no afectan el aspecto o funcionalidad de las fundas.

Lo más recomendable es sumergir la funda en un recipiente con agua y un poco de lejía para que ésta comience a actuar y permita retirar la suciedad. Una vez hecho esto hay que retirarla del recipiente y frotarla con un cepillo para luego pasarla nuevamente por agua y dejarla secando en un sitio sin contacto directo con el sol.

3. Goma

Por su parte, en el caso de las fundas protectoras de goma la mejor opción es utilizar agua y jabón de lavavajillas. Sin embargo, dependiendo del nivel de suciedad es posible que esta opción no permita retirar todos los desperdicios que se pueden acumular sobre su superficie.

En caso de ocurrir esto la persona puede optar por mezclar bicarbonato de sodio con un poco de agua y posteriormente distribuirlo por la zona que aún se encuentra sucia. Con esto debería de ser suficiente y lo único que restaría sería enjuagar con abundante agua.

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