Biden habla por primera vez sobre el allanamiento del FBI en Mar-a-Lago de Trump
El presidente fue cuestionado sobre cuánta participación tuvo sobre el pan del FBI de registrar Mar-a-Lago de Donald Trump el pasado 8 de agosto; Biden se mantiene en su misma posición al decir que no tuvo ningún aviso previo
Entrada posterior de Mar-a-Lago, la residencia de Trump en Palm Beach, Florida. Crédito: MANDEL NGAN | AFP/Getty Images
Tras varias semanas de permanecer en silencio, al fin el presidente Joe Biden habló sobre la redada del FBI en Mar-a-Lago, propiedad de Donald Trump, de donde recuperaron documentos clasificados que el magnate se llevó de la Casa Blanca al salir de la Presidencia.
En una entrevista con Fox News, luego de su discurso de condonación de la deuda estudiantil, el mandatario fue cuestionado sobre si estaba enterado del allanamiento con anticipación.
“Señor presidente, ¿cuánta anticipación tuvo sobre el plan del FBI para registrar Mar-a-Lago?”, preguntó el presentador Peter Doocy.
“No tenía ningún aviso previo. Ninguno, cero”, dijo Biden. “Ni un solo bit. Gracias.”
Desde un inicio, la Casa Blanca ha negado haber recibido algún aviso antes de que se realizara la redada, realizada el pasado 8 de agosto por el FBI.
“El presidente no fue informado, no estaba al tanto”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, al día siguiente y agregó que “nadie en la Casa Blanca recibió un aviso”.
En una conferencia de prensa, realizada al poco tiempo del allanamiento, el fiscal general Merrick Garland informó que personalmente aprobó la búsqueda de la orden de registro.
Apenas esta semana, Trump le pidió a un juez que paralice una investigación del Departamento de Justicia sobre los archivos incautados hace unas semanas en su propiedad ubicada en Palm Beach.
El equipo legal del expresidente, pidió en una demanda, que se nombrara un abogado independiente para supervisar los documentos que los agentes sacaron de Mar-a-Lago.
Según el FBI, en la propiedad se encontraron 11 conjuntos de archivos clasificados. Actualmente, Trump está bajo investigación por posible mal manejo de documentos clasificados durante su Presidencia.
Además, el pasado lunes, su defensa solicitó que se nombre a un tercero como perito para determinar si los archivos incautados están cubiertos por el privilegio ejecutivo, que permite a los presidentes retener ciertas comunicaciones.
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