Tragedia en el mar: Ferry se hundió con más de 800 pasajeros en 1994
El 28 de septiembre de 1994, 852 personas murieron en uno de los peores desastres marítimos del siglo cuando el Estonia, un gran transbordador de automóviles y pasajeros, se hundió en el Mar Báltico.
Se utilizaron helicópteros para rescatar a la mayoría de los 137 sobrevivientes. Crédito: OLIVIER MORIN | AFP / Getty Images
El barco de fabricación alemana viajaba en un crucero nocturno desde Tallin, la capital de Estonia, hasta Estocolmo, Suecia, cuando se hundió frente a la costa de Finlandia.
Estonia, una antigua república soviética que obtuvo su independencia en 1991 (las últimas tropas rusas se fueron en 1994), era un destino turístico popular y asequible para los suecos.
Este barco era un tipo de ferry conocido como “ro-ro”, que presentaba una mezcla heterogénea, música en vivo, baile y bebida, y permitía a las personas conducir vehículos en un extremo del barco y conducir en el otro extremo.
Después de enfrentar un clima tormentoso, con olas que alcanzaron un estimado de 15 a 20 pies, el Estonia se hundió en medio de la noche. Muchos pasajeros quedaron atrapados dentro del barco, mientras que otros, incluso algunos que lograron llegar a los botes salvavidas, se ahogaron más tarde en el agua helada o murieron de hipotermia.
Se utilizaron helicópteros para rescatar a la mayoría de los 137 sobrevivientes.
A raíz de la tragedia, un comité gubernamental conjunto sueco-finlandés-estonio dictaminó que se trataba de un accidente y lo atribuyó al clima tormentoso que provocó que el agua se derramara a través de una puerta de proa abierta y entrara en la cubierta de automóviles del Estonia, desestabilizando el barco y volcando en menos de una hora.
Sin embargo, hubo otros, incluidos algunos familiares y amigos de las víctimas de Estonia, que creyeron que el hundimiento fue el resultado de un agujero preexistente causado por una colisión o explosión.
Dos años después del hundimiento del Estonia, el Bukoba, un barco de vapor de pasajeros, se hundió en el lago Victoria, cerca de Tanzania, en mayo de 1996, dejando un saldo estimado de 1.000 muertos.
En septiembre de 2002, un transbordador de pasajeros senegalés, el Joola, se hundió frente a las costas de Gambia y provocó al menos 1.800 víctimas.
En comparación, cuando el transatlántico Titanic se hundió después de chocar con un iceberg frente a Terranova en su viaje inaugural en abril de 1912, se perdieron aproximadamente 1500 vidas.
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