El Servicio Secreto ocultó un accidente de tráfico de Kamala Harris
El reciente accidente automovilístico menor del convoy de la vicepresidenta Kamala Harris revive preocupaciones sobre el historial del Servicio Secreto de ocultar sus errores
El Servicio Secreto ocultó un accidente de tráfico leve ocurrido el lunes en el que se vio envuelta la vicepresidenta Kamala Harris, reveló el diario The Washington Post.
El agente del Servicio Secreto que conducía a Kamala Harris golpeó con el coche el bordillo de un túnel en el centro de la Washington D.C. con tanta fuerza que fue necesario reemplazar la llanta del vehículo, lo que detuvo la caravana de la vicepresidenta alrededor de las 10:20 a.m., dijeron unas personas, que hablaron con el diario bajo la condición de anonimato.
Harris tuvo que ser transferida a otro vehículo de la caravana para que los agentes pudieran llevarla a salvo a la Casa Blanca. La naturaleza rutinaria del viaje y el alto nivel de capacitación requerido para los agentes que conducen al presidente y al vicepresidente de Estados Unidos, llevaron a muchos en el Servicio Secreto, así como a Harris, a preguntarse cómo pudo ocurrir tal accidente.
The Washington Post apuntó que el Servicio Secreto no solo no transmitió los detalles clave de lo sucedido en la alerta que debió enviar para justificar el retraso a sus superiores, sino que mencionó que “un fallo mecánico” había obligado a los agentes a hacer que la vicepresidenta cambiara de coche.
El portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, precisó a The Washington Post que aunque los agentes no facilitaron toda la información en un primer momento, sí ofrecieron después en persona todos los datos “pertinentes”.
No es la primera vez que esa agencia cubre sus propios errores o los minimiza. Entre los incidentes ocurridos anteriormente en los cuales el Servicio Secreto omite informar o minimiza lo ocurrido, se mencionó que en 2014, por ejemplo, un agente indicó que un militar veterano con problemas mentales que había saltado la verja de la Casa Blanca no iba armado y fue detenido al momento, cuando sí llevaba un arma y consiguió entrar en la mansión presidencial.