Concejal Mitch O’Farrell toma de forma temporal la presidencia del Concejo Municipal de Los Ángeles tras la renuncia de Nury Martínez
O'Farrell, representante del Distrito 13, asume de forma interina el cargo mientras se elige a un nuevo presidente del Concejo Municipal, lo cual podría suceder en la próxima reunión del martes 18 de octubre
El concejal Mitch O’Farrell tomó de forma temporal la presidencia del Concejo Municipal de Los Ángeles después de la renuncia de Nury Martínez a causa del escándalo de una grabación con comentarios racistas que fue divulgada este domingo.
O’Farrell debe tomar las riendas del concejo en medio de una ola de protestas de ciudadanos y funcionarios indignados que exigen la salida de Martínez y los también concejales Kevin de León y Gil Cedillo, quienes también participaron en la controvertida plática grabada, junto con el líder laboral Ron Herrera, quien la noche del lunes dimitió a su cargo como presidente de la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles.
Incluso, el presidente Joe Biden instó a los tres concejales a renunciar como consecuencia de sus comentarios racistas.
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Este martes, horas antes de la reunión del Concejo Municipal, Nury Martínez anunció que se ausentaría de sus funciones como concejal, cargo al que no renunció.
Representante del Distrito 13 de Los Ángeles, O’Farrell asume el cargo en un momento de mucha tensión, como se observó este martes durante la reunión del Concejo, enmarcada con protestas de grupos comunitarios que acudieron al Ayuntamiento para exigir la dimisión de los tres representantes involucrados.
En la grabación, de una plática en octubre de 2021, Martínez hizo comentarios en contra del hijo afroamericano de 2 años del también concejal Mike Bonin, sobre su comportamiento durante un desfile y que merecía una paliza.
Martínez se disculpó y agregó que estaba avergonzada de los comentarios racialmente ofensivos que hizo en la conversación de 2021. De León y Cedillo también ofrecieron disculpas, pero ninguno renunció a sus escaños en el Concejo Municipal.
Es el escándalo más reciente que impacta al Ayuntamiento de Los Ángeles.
El año pasado, Mark Ridley-Thomas fue suspendido mientras enfrenta cargos federales de soborno por supuestas acciones que tuvieron lugar cuando era supervisor del Condado de Los Ángeles.
El exconcejal José Huizar, acusado de cohecho y extorsión, será juzgado el próximo año.
El concejal Mitch Englander se declaró culpable en un caso de obstrucción de la justicia. Dimitió a su cargo y fue encarcelado por obstruir una investigación del FBI sobre su aceptación de obsequios de un hombre de negocios que buscaba favores.
Las acusaciones éticas también alcanzaron la carrera política del alcalde de Los Ángeles Eric Garcetti, quien hace unos meses esperaba ser nombrado embajador en India. Sin embargo, después de que un informe del Senado sugiriera que pudo haber ignorado el presunto acoso sexual por parte de uno de sus principales ayudantes, Rick Jacobs, su posible futuro cargo en Asia parece quedar detenido.
Estos controvertidos casos, aunado al de esta semana en el Concejo Municipal, han provocado un descontento entre los residentes de Los Ángeles y una pérdida de confianza a sus representantes a menos de un mes de las elecciones del 8 de noviembre.
El Concejo Municipal de Los Ángeles podría elegir a su nuevo presidente en la reunión del 18 de octubre.
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