Ex encargada del carrito de bebidas en exclusivo club de golf fue acosada sexualmente, obligada a beber y consumir drogas

Peyton Stover, quien servía bebidas a los golfistas del exclusivo Old Ranch Country Club del sur de Los Ángeles, demandó por $15 millones de dólares al club, ya que toleraron el acoso sexual que sufrió de sus clientes

Ex encargada del carrito de bebidas en exclusivo club de golf fue acosada sexualmente, obligada a beber y consumir drogas

Stover afirma que los golfistas ricos la agredieron sexualmente durante su tiempo como asistente del carrito de bebidas en el club. Crédito: Mike Ehrmann | Getty Images

Una mujer de California está demandando a un exclusivo club de golf, alegando que fue asaltada sexualmente, recibió propuestas subidas de tono, la obligaron a beber alcohol y consumir drogas, mientras trabajaba como encargada de un carrito de bebidas.

Peyton Stover, de 26 años, busca más de $15 millones de dólares de retribución del Old Ranch Country Club en Seal Beach, una ciudad costera al sur de Los Ángeles, donde fue contratada en 2019, informó el diario Orange County Register.

La demanda, presentada la semana pasada en el Tribunal Superior del Condado de Orange, nombra a los acusados ​​como el ex supervisor James Poper, el gerente Mitchel Queen y la empresa matriz del club ClubCorp.

Stover se mudó del estado de Washington para unirse al club de golf de 128 acres como asistente de carrito de bebidas, un puesto en el que se esperaba que construyera relaciones, ayudara a retener a los miembros adinerados y les proporcionara refrigerios.

Pero las cosas tuvieron un comienzo problemático cuando Poper le preguntó durante la entrevista si tenía “piel gruesa” y podía “mantener la boca cerrada”, según la demanda.

La predecesora de Stover también le advirtió que los miembros lascivos la coquetearían y la obligarían a beber alcohol.

“La demandante no estaba segura de cómo reaccionar ante estos comentarios en ese momento y simplemente los descartó”, dice la demanda.

Unos meses más tarde, un miembro no identificado comenzó a acosar y agredir sexualmente a la mujer, lo que incluyó empujarla a un carrito de golf e inclinarla de manera sexual, según la demanda.

Stover afirma que los golfistas ricos la agredieron sexualmente durante su tiempo como asistente del carrito de bebidas en el club.

Cuando ella se quejó con Poper de que la estaban cosificando, él supuestamente respondió: “Ser cosificado siempre te hace ganar más dinero”, y agregó que no tomaría medidas porque los golfistas pagan mucho dinero para unirse al club.

“El demandante entendió que esto significaba que a los miembros se les permitía tratar a los empleados de Old Ranch como quisieran sin repercusiones ni recursos y que Old Ranch toleraba, ratificaba e incluso alentaba esta conducta como parte de su modelo comercial para generar ganancias”, según especificó Stover en su demanda.

Stover también afirma que el propio Poper coqueteó con ella y le preguntó qué color de ropa interior tenía puesta, por lo que recurrió a Queen, el gerente, con la esperanza de que interviniera.

“En cada ocasión, Queen simplemente confirmó que sabía que Poper había acosado sexualmente a otras empleadas de Old Ranch y que su conducta era espeluznante”, según se informa en la presentación.

“Fue la experiencia más traumática que he tenido. Me tomó un año entero (después de dejar Old Ranch) sentirme más fuerte”, dijo Stover.

“Sin embargo, no tomó ninguna acción contra Poper para cesar esta conducta”, agregó.

Stover temía represalias y despido si continuaba quejándose de los sórdidos incidentes, diciendo que “el ambiente en Old Ranch era que los deseos de los miembros del club superaban las obligaciones legales de Old Ranch con sus empleados”, según la demanda.

Un golfista supuestamente le enviaba mensajes de texto constantemente, la manoseaba, la besaba sin su consentimiento y le enviaba artículos y anuncios de juguetes sexuales, según la demanda.

Otro miembro supuestamente le dijo a Stover que le pagaría $300 dólares para ver sus senos, le levantó la camisa frente a otros miembros y le arrojó alcohol.

Un mensaje de texto supuestamente enviado a ella, y obtenido por el medio de comunicación, decía: “Cuando abres esas piernas, me mata Princesa, necesito verte en acción. Ayúdame. Recibirás una buena propina”.

El abogado de Stover, Raymond Babaian, dijo que ella no denunció el presunto asalto a la policía porque tenía miedo de ser victimizada nuevamente.

“Es malditamente atroz. La gerencia debe proteger a sus empleados y tiene el deber de investigar las quejas. Los de Old Ranch fracasaron miserablemente”, dijo al Register.

Stover dijo que finalmente renunció y se convirtió en instructora de yoga, pero que se deprimió y comenzó a beber como resultado de su experiencia.

“Fue la experiencia más traumática que he tenido”, informó el periódico. “Me tomó un año entero (después de dejar Old Ranch) sentirme más fuerte. Realmente hirió mis sentimientos de autoestima”. En su sitio web, el club dice: “Desde su creación en 1967, Old Ranch Country Club ha representado el mejor estilo de vida del sur de California. Con una rica historia impregnada de tradición y hospitalidad occidental, Old Ranch es más que un simple club de campo: es un lugar vibrante y acogedor para que suceda su vida”.

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