GM ofrece renuncias voluntarias a sus empleados asalariados para ahorrar costos

General Motors está ofreciendo renuncias voluntarias con beneficios a algunos de sus empleados asalariados y a sus ejecutivos locales, como parte de su estrategia para reducir costos.

La armadora con sede en Detroit tiene como meta reducir alrededor de $2,000 millones de dólares este año y parte de las alternativas que está desarrollando son las ofertas de retiro voluntario de la empresa.

La oferta de General Motors es opcional para sus trabajadores asalariados y para algunos de sus ejecutivos globales.

Aunque la armadora no ofreció un número meta de renuncias voluntarias, sí indicó que este proceso busca evitar que trabajadores tengan que ser despedidos en el futuro.

Los trabajadores asalariados que pueden optar por la renuncia voluntaria son aquellos que tengan al menos cinco años de servicio en la empresa, mientras que, para los ejecutivos globales, la opción está disponible a partir de su segundo año de servicio.

De acuerdo con General Motors, a la fecha cuenta con una planta laboral de 58,000 empleados asalariados.

A principios de marzo, General Motors anunció el despido de 500 empleados asalariados como parte de su estrategia de reducción de costos.

General Motors ofrece beneficios por renuncias voluntarias

Los trabajadores que opten por dejar la empresa libremente se llevarán algunos beneficios que son mayores a los que la empresa ofrece para los trabajadores cuando son despedidos.

De acuerdo con el plan de retiro voluntario, los trabajadores que opten por esta salida recibirán un mes de salario por cada año de servicio, con un máximo de 12 meses.

Además, General Motors también les ofrecerá un sistema de atención sanitaria denominado COBRA y recibirán las primas completas que recibirían a lo largo del año.

Ajustes ante el futuro incierto de la industria automotriz

Un objetivo secundario que General Motors persigue al ofrecer las renuncias voluntarias es que la reducción de costos le ayude a llevar a cabo su reconfiguración para apostar por los vehículos eléctricos.

Al igual que otras marcas en el mercado automotriz, General Motors se embarcó en la cruzada para transformarse en una marca con autos 100% eléctricos; de acuerdo con la armadora, para 2035 su plan apunta a la venta de sedanes que no consuman gasolina.

Pero el plan no resulta sencillo, de acuerdo con un análisis publicado por The Hill, pues General Motors tiene de frente una serie de gastos multimillonarios en materia de investigación y desarrollo.

Y no solo eso, sino que la armadora tiene que llevar a cabo un plan de reconversión de sus plantas de montaje y de sus líneas de producción para ajustarlas a las necesidades para armar los autos eléctricos.

Sin embargo, el proceso para reducir su planta de trabajadores también alcanza un tercer objetivo que tiene que ver con hacer algunos ajustes ante los temores de una recesión o una posible desaceleración económica en los próximos meses.

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