Juicio Anthony Ávalos: Madre y su novio son condenados a cadena perpetua por el asesinato del niño de 10 años
Heather Maxine Barrón y Kareem Ernesto Leiva fueron sentenciados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional; el juez declaró que los dos acusados eligieron a Anthony Ávalos como chivo expiatorio para expresar su extrema crueldad
La madre de Anthony Ávalos y su novio fueron condenados este martes a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por la tortura y asesinato del niño de 10 años.
El 7 de marzo, Heather Maxine Barrón, de 33 años y originaria de Lancaster; y Kareem Ernesto Leiva, de 37 años, fueron sentenciados en un juicio sin jurado al ser encontrados culpables de los cargos de asesinato en primer grado y tortura por la muerte de Anthony, que ocurrió el 21 de junio de 2018.
El juez del Tribunal Superior Sam Ohta, quien declaró culpable a la pareja, anunció este martes en una corte de Los Ángeles las sentencias de cadena perpetua sin libertad condicional después de escuchar más de dos horas de testimonios por parte de familiares y amigos de Anthony.
“Anthony era un niño indefenso que dependía (de los acusados) para sus necesidades físicas básicas y apoyo emocional. En lugar de eso, Anthony fue torturado y asesinado”, expresó el juez Ohta.
Durante la audiencia, los dos acusados no hicieron ninguna declaración.
Un niño de 8 años fue el primer miembro de la familia en leer una declaración antes de que se dictara la sentencia.
“Extraño a mi primo Anthony. Yo era un bebé cuando lo vi por última vez. Ojalá pudiera recordar todos nuestros momentos juntos, pero todo lo que tengo son fotos e historias que me cuenta mi familia”, expresó el pequeño al leer un escrito preparado.
El menor consideró a Heather Barrón como un monstruo y que merece pasar el resto de su vida en una cárcel.
Los dos acusados renunciaron a su derecho de que un jurado escuchara el caso y fueron hallados culpables por el juez Ohta.
Al dictar sentencia, el juez declaró que para el tribunal, más allá de toda duda razonable, los dos acusados eligieron a Anthony como chivo expiatorio para expresar su extrema crueldad y que trabajaron en conjunto para privar al menor del acceso a líquidos durante un largo tiempo, lo que le provocó una deshidratación severa.
Ohta agregó que el cuerpo de Ávalos presentaba múltiples hematomas, cortes y posibles marcas de quemaduras en distintas partes, lo que demostraba una extrema tortura de la que fue víctima por parte de Barrón y su novio con la clara intensión de matarlo.
El juez también consideró la acusación de asesinato en circunstancias especiales que implicaba tortura contra Ávalos.
Barrón y Leiva también fueron condenados por dos cargos de abuso infantil que involucraban a los medios hermanos de Anthony, que fueron identificados en el tribunal como “Destiny O” y “Rafael O”.
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