“Murciélagos”, las tropas de élite que enviaron a Michoacán a combatir al narco
Estos soldados, que forman parte de las fuerzas de élite del Ejército Mexicano, se caracterizan por completar sus misiones con eficacia, sigilo y precisión
Llegar a formar parte del cuerpo de “Murciélagos” no es una tarea fácil. Crédito: Felix Marquez | AP
El asesinato del alcalde de Uruapan Carlos Manzo produjo una serie de protestas y exigencias de justicia por parte de la población, y el gobierno respondió con el llamado Plan Michoacán.
Mediante esta medida se desplegó un gran número de efectivos militares y federales para dar un golpe contundente a los grupos del crimen organizado que por años han azotado la región, entre ellos el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Como parte de este contingente, fueron enviados 180 elementos de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano, conocidos también como “Murciélagos”, los cuales operarán en violentas zonas como Tepalcatepec, Buenavista y Apatzingán.
Estos soldados, que forman parte de las fuerzas de élite del Ejército, se caracterizan por su capacidad para neutralizar objetivos a larga distancia, son especialistas en explosivos, cuentan con equipos preparados para combates en montaña y dominan las técnicas de infiltración y exfiltración.
Asimismo, poseen conocimiento en el uso de drones tácticos, sistemas para bloquear aeronaves no tripuladas, vehículos diseñados para detectar y desactivar minas, células contra explosivos y un sistema de videovigilancia en tiempo real.
De acuerdo con el diario El Financiero, el apodo “Murciélagos” no es un nombre oficial, sino un sobrenombre que hace referencia a la capacidad de operar en condiciones de baja visibilidad y realizar misiones nocturnas con eficacia, sigilo y precisión.
Además, el nombre simboliza el respeto y el temor que inspiran, dado su alto nivel de entrenamiento y la naturaleza crítica de sus misiones.
Sin embargo, llegar a formar parte del cuerpo de “Murciélagos” no es una tarea fácil, pues los aspirantes deben ser soldados activos del Ejército Mexicano y superar un proceso de selección muy estricto que incluye pruebas físicas, médicas y psicológicas que evalúan su fuerza, resistencia y disciplina.
Una vez que los militares logran ingresar a la unidad, deben someterse a un entrenamiento extremo en combate cuerpo a cuerpo, técnicas de infiltración, paracaidismo, manejo de explosivos y supervivencia en entornos hostiles.
El centro de adiestramiento de este Cuerpo de Fuerzas Especiales se encuentra en Temamatla, Estado de México.
Sigue leyendo:
– Black Mamba: Las poderosas unidades de la Policía que enfrentan a los vehículos monstruo del narco.
– El Plan Michoacán, prueba de fuego para Sheinbaum.