Viajar a lugares con climas más cálidos puede ayudar a la salud mental
El trastorno afectivo estacional afecta a millones con síntomas de depresión. La fototerapia, ejercicio y viajes a climas soleados pueden aliviarlo
Crédito: Roman Samborskyi | Shutterstock
El final de las fiestas decembrinas trae consigo un cambio abrupto: los días más cortos y las temperaturas gélidas marcan el comienzo de un largo invierno, especialmente en lugares como Utah.
Para algunos, este ajuste estacional va más allá de la simple melancolía y se convierte en un trastorno afectivo estacional (TAE), una forma de depresión que afecta aproximadamente al 5 % de los adultos estadounidenses, es decir, más de 10 millones de personas.
Este trastorno, desencadenado principalmente por la falta de luz natural, presenta síntomas como tristeza persistente, ansiedad, fatiga extrema, irritabilidad y pérdida de interés en actividades placenteras.
A menudo, los síntomas se intensifican en los meses más oscuros de enero y febrero, aunque desaparecen con la llegada de la primavera. En casos graves, puede manifestarse incluso con pensamientos de inutilidad o suicidio, lo que requiere atención médica inmediata.
Existen diversas estrategias para combatir el TAE. Uno de los tratamientos más eficaces. Según la Clínica Mayo, esta terapia modifica las sustancias químicas cerebrales asociadas al estado de ánimo, proporcionando resultados comparables a los medicamentos antidepresivos o a la terapia cognitiva conductual. Sin embargo, nada supera el beneficio de exponerse a la luz solar directa.
Pasar tiempo al aire libre, incluso en días fríos o nublados, puede regular el ritmo circadiano y mejorar el sueño nocturno. Actividades como caminatas, juegos en la nieve o simplemente un paseo matutino pueden hacer una gran diferencia. A esto se suma el ejercicio, que no solo combate el estrés y la ansiedad, sino que potencia los efectos positivos de la exposición a la naturaleza.
Para quienes sienten que el invierno es insuperable, una solución es escapar temporalmente hacia climas más cálidos. En Utah, la región de St. George se presenta como un refugio ideal. A tan solo unas horas en auto, esta zona ofrece temperaturas moderadas y más de 300 días de sol al año.
Durante los meses más fríos, las temperaturas diarias promedio alcanzan entre 53 y 60 grados Fahrenheit, un alivio considerable frente al frío extremo de otras regiones.
Escapadas y cambios de ambiente
La idea de adquirir una casa vacacional puede parecer un lujo inalcanzable, pero las propiedades fraccionadas están cambiando esta percepción. Este modelo permite a los compradores compartir los costos y responsabilidades de la propiedad con otros, haciendo que las escapadas regulares a destinos como St. George sean más accesibles.
Por ejemplo, poseer una octava parte de una casa significa disfrutar de unas seis semanas al año en el lugar, sin las complicaciones del mantenimiento, ya que empresas como Fraxioned se encargan de los detalles logísticos.
Estas escapadas no solo ofrecen un cambio de ambiente, sino que también permiten aprovechar actividades al aire libre, como senderismo, ciclismo y caminatas, que favorecen la producción de vitamina D y mejoran el estado de ánimo. Al final del día, regresar a una casa propia en lugar de un hotel o Airbnb añade una sensación de estabilidad y confort.
Es crucial recordar que, aunque estas estrategias pueden ayudar a manejar los síntomas del TAE, quienes enfrentan una depresión severa deben buscar ayuda profesional de inmediato. La línea de ayuda para crisis y suicidio 988 ofrece apoyo gratuito y confidencial las 24 horas del día, proporcionando recursos esenciales para quienes los necesiten.
El invierno puede ser un desafío, pero con las herramientas adecuadas, desde tratamientos médicos hasta escapadas estratégicas, es posible sobrellevar esta temporada y mantener una buena salud mental.
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