Los datos más curiosos del tarot que no conocías
Son diversos los misterios que rodean a esta práctica adivinatoria que usa las cartas como su herramienta de trabajo; conoce algunos de ellos
El tarot es uno de los métodos adivinatorios más consultados en la actualidad y también uno de los que más misterios esconde. Su método interpretativo está basado en la cartomancia, es decir, la lectura del presente, pasado y futuro de una persona a través de las cartas, sin embargo, en sus inicios no era usado para ese fin.
Las curiosidades que rodean al tarot son tantas como el número de simbolismos que poseen los Arcanos Mayores y los Arcanos Menores en su conjunto, ya que es una práctica muy antigua. Repasamos solo algunas de ellas que son bastante significativas y que quizá no conocías.
El origen del tarot y su uso antes de la adivinación
Algunos historiadores señalan que existían rasgos atribuibles al tarot en el Antiguo Egipto y era usado por culturas islámicas antes de su llegada a Europa en 1375. Pero no era utilizado como método de adivinación, sino como juego de mesa.
Leonardo Da Vinci creó su propio mazo del tarot
Uno de los grandes maestros del Renacimiento realizó sus propios bocetos basados en la cosmología y la evolución del universo y las estrellas. De hecho, el tarot de Da Vinci sirvió como punto de partida para que muchos artistas quisiera imitarlo.
Su uso adivinatorio es relativamente moderno
La utilización del tarot como método adivinatorio no es tan antiguo como su origen. Se cree que comenzó a usarse para estos fines hasta el siglo XVIII en sociedades ocultas de Francia e Inglaterra.
La baraja del tarot más antigua se encuentra en la Universidad de Yale
El mazo más antiguo del que se tenga registro físico se ubica en la Biblioteca de la Universidad de Yale. Se trata de una baraja que un pintor anónimo creó para la familia Visconti-Sforza en Milán, Italia, por los años 1442 y 1447, y se le conoce como el Tarot Visconti.
La actitud del consultante es tan importante como la del vidente
Los expertos del tarot aseguran que no solo depende de la habilidad del tarotista para que una lectura sea exitosa o verídica. Es igual de importante la vibra que presente el consultante. Veámoslo como un baile entre dos personas: si ambos ponen de sí el baile será armonioso y bello, pero si alguno de ellos no está en sintonía resultará atropellado y falso. Una lectura de tarot es similar: si ambos tienen la disposición las energías fluirán positivamente para una adivinación certera.
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