Por qué Ford y GM ven con optimismo la próxima administración Biden
En el marco de la crisis del 2009, el gobierno rescató a las principales ensambladoras de Detroit
La administración entrante de Joe Biden ha dejado en claro que la energía limpia será un enfoque central en sus políticas. Los fabricantes de automóviles tradicionales como Ford y General Motors no suelen ser vistos como compañías que vayan de la mano con la transición a las energías limpias.
Pese a que ambas compañías no han enfocado los esfuerzos necesarios para revertir esta situación, es probable que la próxima administración federal las ayude con una inversión de, al menos, $40 mil millones de dólares.
Lo anterior puede ser una realidad, ya que en 2009, la Ley de Recuperación y Reinversión Estadounidense (ARRA, por sus siglas en inglés) incluía préstamos del Departamento de Energía a estos consorcios. Es así que puede ser una realidad la erogación de los $40 mil millones, ya que el gobierno informó que hay fondos en dicha área.
La reciente nominación de Biden de la ex gobernadora de Michigan Jennifer Granholm para ocupar la titularidad del Departamento de Energía podría ser un fuerte indicio para los inversionistas de que el impulso de Biden a la energía limpia podría centrarse en Detroit, ciudad referente del negocio automotriz en el país y el mundo.
Este movimiento debe ser visto por las compañías automotrices como una noticia positiva, ya que Granholm en el marco de la crisis económica de 2009 ayudó a coordinar y supervisar los rescates federales de toda la industria automotriz de Michigan, lo anterior no debe ser considerado como una cosa menor.
La venta de los vehículos eléctricos en todo el mundo está obligando a que las compañías cambien sus modelos de negocio y de producción, ya que firmas como Tesla ya están comenzando a tener un amplio dominio del mercado, por lo que las firmas automotrices consolidadas no deben perder terreno en este nicho.
Las acciones de vehículos eléctricos han mostrado un gran desempeño en el mercado de valores durante el año pasado. Sin embargo, tanto Ford como GM han anunciado inversiones masivas en tecnología automotriz de próxima generación, por lo que habrá una enorme competencia en la producción de vehículos eléctricos.
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