Chef de restaurante de comida mexicana vende su lujosa mansión en Malibú por $18 millones

La reconocida cocinera cuenta con una muy linda casa que se asemeja a una antigua hacienda mexicana, en la que tenía carretas y hasta cuadros de Diego Rivera y Frida Kahlo

Casa Geraldine Gilliland — Geraldine Gilliland puso a la venta Rancho Chiquita, en Malibú. Crédito: Geraldine Gilliland /Instagram/Rancho La Chiquita/YouTube | Cortesía

05 Ago 2021, 11:33 AM EDT

El mundo de la gastronomía es muy demandante, pero también da grandes satisfacciones, tal y como queda demostrado con la reconocida chef irlandesa Geraldine Gilliland, quien acaba de poner a la venta la lujosa mansión que compró en Malibú, en California, tras varios años de sacrificios.

La propiedad, por la que está pidiendo $18 millones de dólares, fue comprada por la dueña del restaurante de comida mexicana Lula Comida Mexicana hace más de 25 años y con el pasar del tiempo la fue adecuando a sus gustos y necesidades.

La residencia, de la que quedó perdidamente enamorada por su misticismo y que goza de una extensión de 6,782 pies cuadrados, fue nombrada por Geraldine como Rancho Chiquita, al contar con arquitectura y diversos elementos alusivos a México.

La casa principal, que se asemeja a una hacienda mexicana, cuenta con cinco recámaras, con cinco baños, con cocina de chef, con antecomedor, con comedor, con sala de estar, con sala principal, con estudio, con garaje para tres vehículos, entre otras habitaciones.

Su cocina es bastante amplia, colorida y abierta. Está equipada con una alacena de color café, con electrodomésticos de alta gama, con una isla central que funciona para preparar los alimentos, con dos ventiladores de techo y con azulejos muy característicos de las casas antiguas mexicanas.

Es tal su pasión por México que en la sala contaba con diversos retratos de los pintores Diego Rivera y Frida Kahlo, así como con las imágenes de varias catrinas, el personaje más emblemático del Día de Muertos.

Al exterior, en su lote de 225 acres, la mansión goza de muy extensas áreas verdes, de un jardín santuario amurallado, de fuentes, de piscina con su respectiva área de spa, de jacuzzi, de una cocina exterior, de una área de parrillada, entre otras amenidades.

También cuenta con una casa de invitados con dos dormitorios, con cocina, con comedor y con sala, la cual, en su momento, tuvo un rol más protagónico, pues llegó a ser la casa principal.

Otro punto a destacar del inmueble es su ubicación, ya que desde cada rincón se tienen unas envidiables vistas del Océano Pacífico y de las montañas que lo rodean.

Son tales las dimensiones de la propiedad, que ahí se han desarrollado bodas y todo tipo de eventos, se grabó el reality musical ‘The Voice’ e, incluso, por un tiempo sirvió como albergue para perros sin hogar.