De forma remota, Mark Ridley-Thomas regresó a la Corte de Los Ángeles; todavía no hay fecha para su juicio
Fiscalía indicó que expediente contra Mark Ridley-Thomas cuenta con más de 35,000 páginas; el juez solicitó a ambas partes cancelar fecha del juicio, previamente establecida para diciembre
La corte de la ciudad de Los Ángeles llevó a cabo este lunes una breve audiencia sobre el caso de corrupción en contra del concejal Mark Ridley-Thomas y Marilyn Flynn, exdecana de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Sur de California, pero no quedó determinada una fecha para su juicio.
Por espacio de 10 minutos, la presencia de Ridley-Thomas estuvo presente en la Corte, pero fue a través de Zoom.
El juez escuchó un resumen del caso por parte de la fiscalía y solicitó que ambas partes estipularan que se cancelara una fecha de juicio, previamente establecida para diciembre.
El caso en contra de Ridley-Thomas ya cuenta con más de 35,000 páginas de material probatorio, de acuerdo con la fiscal federal adjunta Ruth C. Pinkel.
La fiscal adjunta mencionó que el caso en el juicio duraría unas dos semanas, en tanto que la parte defensora no ofreció una estimación de tiempo.
Al hacer una descripción del caso, la fiscal adjunta lo calificó como un caso de fraude y soborno, basada en la conducta de Mak Ridley-Thomas cuando fue miembro de la Junta de Supervisores de la ciudad de Los Ángeles.
Ridley-Thomas, de 63 años, y Flynn, de 83 años, son acusados de 20 cargos por un acuerdo secreto por el cual el ex concejal, cuando era integrante de la Junta de Supervisores del condado, dirigió dinero público a la universidad a cambio de que admitiera a su hijo Sebastian Ridley-Thomas en una escuela de posgrado con una beca de matrícula completa y una cátedra remunerada.
Fiscalía señala supuestos acuerdos ilegales
Presuntamente, Flynn hizo los arreglos para canalizar una donación de $100,000 dólares provenientes de los fondos de la campaña de Ridley-Thomas a través de la universidad a una organización sin fines de lucro, la cual sería operada por su hijo, un ex integrante de la Asamblea.
Dicha donación provocó que se iniciara una investigación por parte de la Fiscalía Federal en Los Ángeles, la cual permanece abierta.
De acuerdo con la acusación formal, a cambio Ridley-Thomas apoyó los contratos del condado relacionados con la Escuela de Trabajo Social, incluidos acuerdos para otorgarle servicios al Departamento de Servicios para Niños y Familias del condado de Los Ángeles y al Departamento de Libertad Condicional.
También se contempló una enmienda a un contrato con el Departamento de Salud Mental, que le reportaría a la escuela ingresos estimados en millones de dólares.
Acusados niegan ser culpables
Ridley-Thomas y Flynn negaron rotundamente que existiera alguna irregularidad, y afirmaron que las evidencias que presentarán les permitirá limpiar su reputación.
Ridley-Thomas y Flynn son acusados de un cargo de conspiración y un cargo de soborno; así como por dos cargos de fraude postal y 15 cargos de fraude electrónico.
En un inicio, se estableció para diciembre la fecha de juicio cuando ambos acusados fueron procesados en un tribunal federal de Los Ángeles, pero no podrá realizarse.
El juez de distrito Dale S. Fischer solicitó a ambas partes presentar documentación que indique que es necesaria reprogramar la fecha de juicio.
Presunto acoso sexual del hijo de Ridley-Thomas
La acusación formal indica que los hechos sucedieron entre 2017 y 2018, comenzando el hijo de Ridley-Thomas fue investigado por un presunto acoso sexual en la Asamblea.
Sebastian Ridley-Thomas renunció a la Asamblea en 2017, pero insistió en que su salida fue por motivos de salud y no a la mencionada investigación por acoso sexual.
El cargo de conspiración que indica la acusación conlleva una condena de hasta cinco años en una prisión federal. Cada cargo de soborno implicaría una pena máxima de 10 años, en tanto que cada cargo por fraude postal y electrónico establece un máximo de 20 años.
Flynn fue decana durante 21 años. La acusación indica que la USC la destituyó del cargo en junio de 2018.
La fiscal adjunta indicó que, como decana, Flynn percibía $240,000 dólares al año, además de un estipendio adicional de $170,000 dólares.
Ridley-Thomas fue suspendido de su puesto como concejero municipal y su salario y beneficios fueron congelados.
Antes de ser suspendido, el concejal indicó que no renunciaría y que continuaría en su labor ante la crisis de vivienda y personas sin hogar en Los Ángeles.
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