Reconciliarse con El Hijo del Santo, uno de los deseos que el comentarista Arturo Rivera no pudo cumplir antes de morir

“El Rudo” dio su último aliento este miércoles 9 de febrero, sin embargo, dejo inconcluso uno de sus más grandes deseos: la reconciliación con El Hijo del Santo, luego de que una controversia los distanciara y acabara con su amistad

El Hijo del Santo fue amigo de Arturo Rivera.

El Hijo del Santo fue amigo de Arturo Rivera. Crédito: Imago7

Arturo Rivera, el portador de una de las voces más icónicas en las transmisiones de lucha libre mexicana, falleció este miércoles 9 de febrero, dejando pendiente uno de sus grandes anhelos: reconciliarse con El Hijo del Santo, ya que llegaron a ser buenos amigos, pero hace unos años un tuit del comentarista ocasionó que el gladiador se distanciara. 

De acuerdo con Mediotiempo, “El Rudo” Rivera fue el culpable de que su amistad se diluyera, ya que después de varios años de colaboraciones viajes y aventuras, publicó en su cuenta de Twittter un mensaje en el que atacó al hijo de la leyenda.

“Terrible. El Hijo del Santo sigue viviendo de la gloria de su padre. Mala carrera, demandas, odio con su familia, son el común denominador de su vida. Lo que pudo ser una leyenda se fue a la basura por su ego. Pobre tipo”, escribió en octubre del 2018.

Por su parte, el hijo de El Enmascarado de Plata confirmó el distanciamiento en una entrevista con Adela Micha en el 2019 y diciendo que cuando él cambió de empresa de lucha libre, el comentarista comenzó a atacarlo:

“En su momento tuvimos una bonita amistad, trabajamos en una película y en una caricatura con Cartoon Network y llegamos a la idea de que fuera dibujado. Él estaba muy casado con AAA y cuando me separé de la empresa, siento que tomó partido. Lamentablemente me empezó a atacar”, expresó.

Me llevaba muy bien, viajábamos, nos reíamos mucho y conmigo siempre fue muy respetuoso en sus narraciones, pero siento que tomó partido”, agregó en la charla con la comunicadora.

Luego de esto, Arturo Rivera, en un evento en el Gimnasio Juan de la Barrera, se reconcilió con L.A. Park, otro gladiador con quien tuvo una gran amistad y, posteriormente, varias diferencias; al terminar, manifestó su deseo de limar asperezas con otras dos figuras del pancracio:

“Después de L.A. Park Solo me quedan dos por reconciliarme: Fuerza Guerrera y el Hijo del Santo, yo no vivo a base de rencores ni molestias, prefiero sumar que restar”, comentó en entrevista para La Tijera Lucha Libre, un canal de YouTube.

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