5 formas en las que ser soltero puede costarte más dinero que si estás casado
Ser soltero puede darte la sensación de libertad en muchas decisiones que no deben ser negociadas; sin embargo, la vida en solitario también puede resultar más costosa, desde pagar las facturas, hasta la jubilación
Incluso viajar puede resulta más costoso si lo haces como soltero, pues algunas empresas hacen cargos adicionales. Crédito: Shutterstock
Vivir soltero puede tener sus ventajas, como que en muchas decisiones de la vida no debes pasar por una negociación, principalmente en aquella que tienen que ver con las fianzas personas; sin embargo, hay algunas situaciones en las que puedes gastar más que si estás casado.
Una de las diferencias más notorias de vivir soltero es que todos los compromisos financieros debes asumirlos en solitario, a diferencia de la vida en pareja en la que, por lo general, los problemas y emergencias económicas se van solventando en pareja.
Hay al menos cinco formas en las que ser soltero puede costarte más que estar casado.
1. El 100% de las facturas son tu responsabilidad
Empezamos por la más básico que es pagar todas las facturas que implica un hogar. Cuando se tiene una pareja es común que los costos de los servicios como el gas, la energía eléctrica y el agua se dividan en entre dos.
Sin embargo, todos estos gastos básicos caerán en tu presupuesto si vives en solitario. Pero no solo es esto, antes de pagar los servicios tienes que resolver en dónde vas a vivir.
La soltería también te va a implicar gastos el 100% de alquiler o por el pago inicial de una hipoteca para una vivienda; todos esto caerá en la responsabilidad de tu presupuesto.
2. Solo ante las emergencias
Las emergencias pueden ocurrir en cualquier momento y los expertos en finanzas personas recomiendan siempre estar preparados para afrontarlas con cierta solvencia.
Pero cuando vives soltera o soltero, esas emergencias deben correr con tu presupuesto, si es que lo tienes.
La diferencia fundamental es que cuando este tipo de situaciones inesperadas ocurren, por ejemplo, perder el empleo, en la vida de pareja no se pierden el 100% los ingresos, lo que te da una oportunidad de afrontarlas.
Vivir solo implica que debes tener un respaldo para este tipo de situaciones, que también puede incluir una enfermedad.
Según los especialistas en finanzas personales, la recomendación para las personas que viven solteras es que tengan un ahorro de emergencia de seis a 12 meses de su sueldo, ya sea para tener dinero mientras se busca un nuevo trabajo o para solventar una urgencia médica.
3. Viajar puede ser más caro
Si piensas que la soltería te resultará más económica al momento de hacer tus maletas para recorrer el mundo podrías equivocarte, al menos si lo haces viajando en algunos paquetes de turismo.
Algunas empresas que organizan experiencias de viaje en grupo tienden a cobrar una tarifa adicional a las personas que no lo hacen en pareja.
Esa tarifa de alguna manera estará cubriendo el costo de alguien si hubieras contratado el viaje en pareja; los operadores explican que no se trata de un cargo extra, sino de una compensación por el costo de una persona que no hará ese viaje.
4. Menos beneficios del Seguro Social
Si decides que tu vida la pasarás en solitario debes saber que, incluso en los beneficios del Seguro Social, tendrás algunas diferencias en comparación con las personas que deciden hacer una vida en pareja.
La diferencia radica en que no solo recibirás menos; en algunos casos, que otras personas con familia de tus beneficios de Seguro Social, pues algunas familias pueden recibir al menos 50% más en su cheque, sino que tu pensión se perderá cuando mueras.
Las personas que viven en pareja y tienen familia pueden tener derecho, en algunos casos, a un pago adicional calculado a partir de los beneficios en el momento de su muerte.
5. Problemas para la jubilación
Uno de los problemas más graves que las personas que deciden quedarse solteras pueden llegar a enfrentar es la falta de ahorros para la jubilación.
A diferencia de las personas que viven en pareja, las solteras tiene menos posibilidades de ahorrar y es muy probable que cuando lleguen a la jubilación, no tengan dinero suficiente para afrontar sus gastos básicos de vivienda, alimentación, transporte, ropa y atención médica.
Este problema es particularmente peligroso para las mujeres que, por lo general, pueden ahorrar tres veces menos que sus contrapartes casadas, de acuerdo con el Instituto de Investigación de Beneficios para Empleados.
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