Senado de Texas aprueba proyecto de ley para poner fin a la votación por condados el día de las elecciones

El Senado de Texas, de mayoría republicana, aprobó el jueves un proyecto de ley para prohibir la votación por condados el día de las elecciones, parte de un patrón de legislación prevalente en los estados gobernados por republicanos destinado a endurecer las leyes electorales, restringir el derecho al voto y proteger las elecciones contra supuestos fraudes.

El Proyecto de Ley del Senado 990, que se aprobó en una votación de línea partidaria, requeriría que las personas voten en su precinto asignado el día de las elecciones, en lugar de hacerlo en cualquiera de los centros de votación habilitados en todo el condado en que residen.

Alrededor de 90 condados de Texas tienen permiso de la oficina del secretario de Estado para usar los lugares de votación habilitados en todo el condado el día de las elecciones.

Los sitios de votación del condado permanecerían abiertos durante todo el período de votación anticipada. El proyecto de ley ahora pasa a la Cámara estatal, donde se remitió un proyecto de ley idéntico al Comité de Elecciones.

El senador estatal Bob Hall, el legislador republicano que presentó la legislación, dijo que el proyecto de ley aumentaría la seguridad electoral y evitaría que la gente votara en varios lugares.

Sus opositores expusieron que el secretario de Estado había desacreditado todas las denuncias de fraude electoral y que el proyecto de ley serviría sólo para dificultar que las personas en los condados en expansión encuentren un lugar para votar.

“No hay base, no hay prueba, no hay evidencia de que alguien haya votado en más de un lugar. Aquí se está adoptando un enfoque teórico”, dijo la senadora estatal Carol Alvarado, demócrata, y calificó la posición de Hall de “muy caso débil”.

La senadora estatal demócrata Sarah Eckhardt dijo en el pleno del Senado que la mayoría de los votantes utilizan los centros de votación de todo el condado, porque permiten que las personas que viajan a sus trabajos o que tienen largas jornadas laborales voten en cualquier parte del condado y esos lugares también son más accesibles para personas con discapacidades, dijo Eckhardt.

No hay evidencia de fraude electoral generalizado en Texas o en todo Estados Unidos, pese a los reclamos de los conservadores republicanos y del expresidente Donald Trump, tras la derrota electoral que sufrió en las elecciones de 2020.

La oficina del fiscal general de Texas Ken Paxton tiene registrados desde 2005 534 delitos de fraude electoral y se han perseguido 510 casos contra 155 personas por parte de la Oficina del Fiscal General y sólo hay 42 delitos de este tipo pendientes de acusaciones.

El Brennan Center for Justice tiene un proyecto dedicado al supuesto fraude electoral en Estados Unidos, donde se señala que: “Los políticos de todos los niveles del gobierno han afirmado repetida y falsamente que las elecciones de 2016, 2018 y 2020 se vieron empañadas por un gran número de personas que votaron ilegalmente. Sin embargo, una extensa investigación revela que el fraude es muy raro, la suplantación de identidad de los votantes es prácticamente inexistente y muchos casos de presunto fraude son, de hecho, errores de los votantes o administradores”.

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