Sin temor a la muerte: tragedia de San Antonio no detiene a cientos de inmigrantes a viajar hacinados
La muerte de 53 personas en un tráiler en San Antonio, Texas, no ha hecho eco en cientos de inmigrantes que a diario buscan llegar a Estados Unidos para cumplir en tan anhelado sueño americano y poder sacar adelante a sus familias, aunque arriesguen su seguridad o incluso terminen muertos
La muerte de 53 inmigrantes al interior de un tráiler en San Antonio, Texas, no ha impedido el viaje de miles de personas que desean vivir el tan anhelado “sueño americano”, así tengan que arriesgar su vida, al menos, así lo han dejado ver los múltiples hallazgos de camiones y automóviles en México, así como en Estados Unidos, repletos de personas que viajan desde Sudamérica y Centroamérica.
Incluso, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) ha dado a conocer a través de su oficina que los arribos de los inmigrantes a la frontera siguen siendo muy por encima de los promedios históricos y están por sobrepasar los dos millones el año fiscal 2022. El miedo a morir a cambio de encontrar una vida mejor no detiene a nadie…
Víctimas de las mentiras
Los inmigrantes suelen ser víctimas de fraude, delitos violentos, condiciones inseguras y explotación sexual mientras viajan y en sus países de destino, señala el informe “Dentro del mundo de la desinformación dirigida a los inmigrantes en las redes sociales” de Tech Transparency Project.
El reporte también indica que muchos de los inmigrantes deciden emprender el viaje rumbo a Estados Unidos al guiarse por afirmaciones falsas hechas en línea, como la creencia de que las fronteras están abiertas ahora que la pandemia de la COVID-19 se ha calmado, o que las mujeres embarazadas pueden ingresar a los EE.UU. sin documentación.
Incluso, otros tienen una sensación de que la inmigración es “más fácil” ahora, algo que no está respaldado por las estadísticas oficiales.
¿Cómo llegar? Esa es la pregunta que casi en un abrir y cerrar de ojos queda resuelta para el inmigrante, quien recibe en su teléfono celular el contacto de un contrabandista de personas, que promete conducirlo hasta Estados Unidos, por la vía fácil si cuenta con un buen presupuesto o bien, por la vía complicada si no logran juntar lo que se le pide.
El dinero no es problema para quienes buscan cruzar a Estados Unidos porque según cuentan los inmigrantes “lo recuperan rápido”, así que la casa de empeño se convierte en su mejor aliado y ya con $2,000 o hasta $7,000 en la mano, salen de casa con la maleta llena de ilusiones en busca de una mejor vida para él o ella y los suyos.
Las trampas de “coyotes” en Faceboook
Al menos 200 inmigrantes dijeron a los entrevistadores de Tech Transparency Project que se habían conectado con coyotes en línea, debido a que se anuncian directamente en grupos de Facebook o WhatsApp enfocados a aquellos que buscan llegar a Estados Unidos.
Existen anuncios que ofrecen viajes más rápidos a EE.UU., además, los coyotes suelen responder a preguntas sobre las condiciones en la frontera o el estado de la ley de inmigración del país de las barras y las estrellas, con ofertas de documentos o transporte falsos
Otros encuestados mencionaron cuentas específicas de Facebook que, según dijeron, les habían prometido un paso seguro a tierras norteamericanas, pero lo único que hicieron fue tomar su dinero y entregarlo a las autoridades de inmigración.
En una publicación en un grupo de Facebook para inmigrantes que intentan cruzar el Río Grande en Eagle Pass en el centro de Texas, un administrador publicó una foto tomada desde un ángulo que hace que parezca que el lecho del río está completamente seco, aunque en realidad el día del posteo, había niveles de agua cercanos a los tres pies de profundidad.
La tragedia más grande
El pasado mes de junio el mundo quedó conmocionado después de que los medios de Estados Unidos informaron sobre el hallazgo de un tráiler con más de 40 cuerpos sin vida en su interior en San Antonio, Texas.
En cuestión de horas el número de muertos subió y llegó hasta 53, convirtiendo esta tragedia inmigrante en la más mortal que se ha vivido en Estados Unidos en los últimos años; 27 mexicanos, 14 hondureños, siete guatemaltecos, así como dos salvadoreños murieron asfixiados, sólo 14 inmigrantes lograron sobrevivir.
Se sabe que 67 personas viajaban hacinadas, entre ellos al menos cinco menores de edad, sin ventilación, sin agua, sin una ventana que permitiera que el aire circulara al interior de la caja del tráiler, por si fuera poco, la temperatura de aquel día llegó hasta los 40 grados centígrados, noticia que no era desconocida por los inmigrantes quienes llevaban días esperando el vehículo que los llevaría hasta su destino y que deja al descubierto que ni las señales de muerte impedirán a los inmigrantes llegar, al costo que sea, a Estados Unidos.
El chofer de la unidad, Homero Zamorano, fue detenido por las autoridades bajo señales de intoxicación por metanfetamina, según informó a la prensa el congresista Henry Cuellar.
Esta reciente catástrofe enfatiza la importancia de que los inmigrantes tengan acceso a información confiable para tomar decisiones seguras e informadas sobre su viaje, resalta el informe de Tech Transparency Project.
Asimismo, añade que las entrevistas que han realizado con las personas que buscan llegar a Estados Unidos y la revisión de los datos de las redes sociales dejan ver que las plataformas, especialmente Facebook, no están protegiendo a algunas de las personas más vulnerables del mundo, de la información errónea que podría defraudarlos, conducir a la deportación o poner sus vidas en riesgo.
Cientos de personas hacinadas
El transporte de inmigrantes en camiones es una constante, pues apenas en marzo pasado los agentes de la Estación Norte de Laredo del CBP detuvieron un intento de contrabando de personas que involucraba un camión comercial.
Cuando el vehículo acercó al carril de inspección principal en el puesto de control de la I-35 el pasado 22 de marzo, un canino de la agencia migratoria alertó a los agentes sobre la posible presencia de humanos ocultos y/o narcóticos dentro del vehículo. Los agentes realizaron una búsqueda en el área de carga del camión y descubrieron a 17 personas indocumentadas en el interior de los países de México, El Salvador y Guatemala.
En diciembre de 2021, agentes de la Patrulla Fronteriza del sector de Laredo detuvieron dos intentos de contrabando de personas.
El primer incidente ocurrió el 9 de diciembre, cuando agentes respondieron a un reporte de un vehículo sospechoso en un rancho al sur de Laredo, Texas. Los agentes descubrieron a siete personas indocumentadas de México.
El segundo hecho ocurrió al siguiente día cuando una camioneta con un remolque se acercó al punto de control de inmigración en una autopista al oeste de Freer, Texas. Al inspeccionar el tráiler fueron descubiertas 24 personas indocumentadas de México, Honduras y Guatemala.
También han sido encontrados inmigrantes hacinados en casas o departamentos, bajo terribles condiciones.
Apenas el 8 de agosto, la Unidad Anticontrabando de la Estación Ysleta de la Patrulla Fronteriza junto con sus contrapartes en la ASU de la Estación Clint, descubrieron un escondite de contrabando de personas cerca de North Loop Dr. y North Carolina Dr., ahí hallaron a 11 inmigrantes, cinco de Guatemala, cuatro de México y dos de El Salvador.
Un día después, con la información derivada del hallazgo previo, los agentes asignados a Clint Station ASU llegaron a una posible casa de escondite de contrabando de personas cerca de Sean Haggarty Dr. y McCombs St. Al arribar a la propiedad llena de basura, descubrieron a 25 migrantes adultos y dos niños no acompañados. Los migrantes son de México, El Salvador, Ecuador y Guatemala.
Además, en julio de este año, agentes de la Patrulla Fronteriza rescataron a más de 100 inmigrantes ilegales de tres miserables escondites en un período de 24 horas en El Paso, Texas, dijeron las autoridades el jueves.
Decenas de personas fueron vistas hacinadas en habitaciones repugnantes en casas sucias y habitaciones de motel, se pudo observar en las imágenes de los 103 inmigrantes, publicadas por la Patrulla Fronteriza.
No hay temor a la muerte
América Latina se vistió de luto por los 53 inmigrantes que perdieron la vida en el “país soñado”; padres, madres, hijos, nietos, primos y conocidos fueron sepultados con su maleta llena de ilusiones.
Pese a la noticia del fallecimiento por asfixia, cientos de inmigrantes no se detuvieron a analizar la situación y emprendieron la búsqueda del sueño americano, pero el camino de cientos de ellos ha sido coartado por el Instituto Nacional de Migración (INM) mexicana.
A más de un mes de la tragedia en San Antonio, las autoridades mexicanas dieron a conocer que un tráiler en el que viajaban 400 inmigrantes fue abandonado en la carretera de Veracruz, México, a unas cuantas millas de un filtro de migración.
Los inmigrantes, desesperados por la falta de oxígeno, empezaron a romper la caja del tráiler, mientras otros más hacían ruido para que “alguien” los ayudara; fue gracias a esa desesperación que no hubo muertes que lamentar.
Unos lugareños que se percataron de los gritos de “auxilio” permitió que todos los inmigrantes pudieran salir del camión sanos y salvos. Las autoridades solo encontraron a 94 indocumentados, el restó logró escapar para evitar ser deportados a su país.
El INM no ha dejado de tener llamadas de auxilio para reportar camiones con presencia de indocumentados.
A días de que el tráiler con 400 inmigrantes fuera abandonado por los traficantes de personas, se reportó el hallazgo de camión que aparentemente transportaba desperdicio industrial, pero en realidad era una pantalla para la policía mexicana, porque detrás de botes aplastados, puertas de lámina, entre otros desechos, había 45 inmigrantes hacinados a punto de morir asfixiados por la falta de aire.
De acuerdo con las autoridades mexicanas, 20 venezolanos, nueve dominicanos, cinco cubanos, un guatemalteco, un salvadoreño y un nicaragüense fueron puestos a disposición de las autoridades consulares.
Una crisis que aumenta
Apenas habían transcurrido unos días del mes de agosto cuando las autoridades reportaron a través del INM que 73 mujeres y 34 hombres que viajaban hacinados fueron rescatados con vida después de realizar una verificación migratoria en un punto sobre la carretera de Oaxaca, Izúcar de Matamoros.
De acuerdo con los Agentes Federales de Migración (AFM) notaron algo extraño en el camión pesado y, cuando le pidieron que detuviera su paso, descubrieron a 116 inmigrantes viajando en condiciones deplorables, donde la falta de aire una vez más era el tema central.
Mientras la noticia de la muerte por asfixia se escuchaba en todos los noticieros, miles de inmigrantes se preparaban para emprender el viaje de sus sueños, también, a bordo de tractocamiones, uno de los transportes más usados en los últimos años para llegar a Estados Unidos, pese a las advertencias de que la falta de aire puede terminar con su vida.
La probabilidad de que se repitan tragedias como la de los 53 inmigrantes fallecidos en San Antonio es alta, debido a que no se han atacado los factores que están detrás del negocio de tráfico de personas, señaló Óscar Chacón, presidente de la coalición Alianza Américas en entrevista para el podcast ‘La Ciudad sin Límites’.
El experto dijo que se ha dado un enfoque equivocado, pues las autoridades se han dedicado a ir en contra de los “coyotes”, en vez de atender los factores que dan sentido a este tipo de negocio”.
Chacón detalló que hay un “problema falta de voluntad, de la falta de decisión de parte de quienes son tomadores de decisiones, no solo en el gobierno, sino también en las esferas del mundo corporativo, al fin de cuentas se lucra con que las cosas sigan estando como están”.
“Entre más medidas que buscan contener flujos a cualquier costa, se ponen en vigencia, más le damos clientela a redes criminales que ofrecen solventar los problemas de forma muy costosa y muy insegura, y en ese sentido sí hay una conexión entre Quédate en México, entre el uso indebido del título del Título 42 y lo que ha significado para decenas de miles sino cientos de miles de personas migrantes, y la tragedia que vimos en San Antonio son síntomas de la misma infección, por decirlo así”, dijo enfáticamente Chacón.
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